Aires de guerra enrarecen atmósfera ruso-georgianaMoscú, PL, para RIA Novosti. Por Odalys Buscarón. La posibilidad de una agresión armada contra la república separatista de Abjasia mantiene hoy al rojo vivo las fricciones entre Rusia y Georgia, cuyo gobierno niega que existan tales planes.
El pasado 30 de abril la cancillería rusa denunció que Tiflis preparaba un escenario para iniciar operaciones militares contra el territorio vecino, separado de ésta desde 1992 tras quedar sin efecto la autonomía de la época soviética.
La movilización de más de mil efectivos y armamentos de gran calibre hacia la línea de seguridad generó suspicacias en Moscú por el hecho de que la alarma naranja puede convertirse en rojo vivo bajo las circunstancias actuales.
A los roces a nivel de gobierno y denuncias de una y otra parte se suma hoy la versión difundida por las agencias rusas Interfax y RIA Novosti sobre la preparación de un ataque armado urdido por Georgia contra Abjasia.
Basada en revelaciones de una fuente castrense de este país, la información asegura que el plan podría llevarse a cabo en los próximos días.
Se planea, según la versión, ocupar importantes objetivos en la zona costera de esa república y la intervención de cerca de tres mil efectivos en la parte baja del Desfiladero de Kódor.
De acuerdo con los medios periodísticos, el plan de Tiflis es preparado con ayuda de especialistas extranjeros, sin que se precise su procedencia.
Agregan que se trata de presuntos asesores que están a cargo de la modernización del ejército georgiano.
Precisamente las reformas en las Fuerzas Armadas es uno de las exigencias que figuran en el plan de ingreso a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), un proyecto acariciado por Tiflis.
Unido a medidas en el terreno diplomático, Rusia decidió a inicios de mayo reforzar el contingente de pacificadores (unos dos mil) apostado en la zona de conflicto georgiano-abjasia con mil hombres más, y según Moscú, no violan los acuerdos de paz suscritos en 1994.
Ante la protesta de la administración del presidente Mijail Saakashvili, el Kremlin esgrime como principal argumento la protección de ciudadanos rusos en esa república. Casi un 90 por ciento de la población se acogió a esa ciudadanía.
El embajador especial para las relaciones con la Comunidad de Estados Independientes, Valeri Keniaikin, comentó que Moscú está lista para emplear "métodos militares" en defensa de sus ciudadanos en Abjasia y Osetia del Sur.
Mientras llega hasta aquí el olor a pólvora, Georgia insiste en calificar los rumores de desinformación deliberada. El portavoz del ministerio de Interior, Shoty Utiashvili, aseguró que en el desfiladero permanecen solo las agrupaciones policiales.
El presidente Saakashvili, empero, admitió este fin de semana que su país se rearma y fortifica con nuevos y modernos armamentos para contrarrestar una ocupación.
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