(Hasta cuando coño le
hacen el juego a la derecha, es hora de atacar a los CLAPS)
Por: Ricardo Abud
Por: Ricardo Abud
"Ver a la gente en
una sociedad capitalista
y concluir que la naturaleza humana es egoísta,
es como ver a la gente en una fábrica donde
la polución está destruyendo sus pulmones
y concluir que la naturaleza humana es toser".
y concluir que la naturaleza humana es egoísta,
es como ver a la gente en una fábrica donde
la polución está destruyendo sus pulmones
y concluir que la naturaleza humana es toser".
Andrew Collier
Sin lugar a dudas que uno de los
logros de Chávez fue darle protagonismo a muchos invisibles, hoy transformados
en intelectuales del apocalipsis y visiblemente consternados ante el fracaso de
su estupidez y la cantidad de sandeces
que a diario escriben u opinan, la derecha les da espacios y estos desesperados
de figurar asumen esos espacios para a atacar toda iniciativa que desde el
gobierno se propone como un canal para alivianar la crisis en que estamos
envueltos, por parte de una derecha criminal y despiadada que decidió jugar con
el hambre del pueblo con ha sido costumbre de esos sinvergüenzas.
Leía un artículo recientemente (Los
CLAPs: Poner a pelear a pueblo contra pueblo por una bolsa) y fue mucha la
molestia, entre el discurso de quien suscribía el articulo y los ya los ya
consabidos hambreadores del pueblo, un mismo discurso e igual propaganda.
Hablar de la incapacidad del
estado para producir alimentos seguirá siendo
temerario y no entender lo que un proceso de transición histórica (Negación de
la Negación) lleva inmerso, un proceso de
aciertos y desaciertos, en cual no hay ensayo histórico que permita permear estructuras
heredadas de una sociedad criminal, excluyente, clasista, anti humanista y depredadora, en cual los medios
y los modos de producción estaban y están en manos de oligarquías criollas y foráneas,
no es fácil revertir un modelo de ese calibre y menos aún en el siglo XXI,
donde la guerra toma un valor cuantitativo y cualitativo que rompe los
paradigmas de lo convencional.
Muchos opinadores de oficio
definitivamente hoy le hacen el juego a la derecha de manera consciente o inconsciente,
lo cual no justifica su estupidez e intrascendencia. A estos
opinadores de profesión desconocida les recuerdo que la URSS en sus mejores
tiempos no pudo producir y abastecer de alimentos a toda su población, ya dirán
algunos que por eso se desmembró y fue un total fracaso la URSS y el bloque Oriental, no fue así, fueron
factores internos y externo, motivaciones históricas que provocaron la caída, considero
que este no es el espacio para hablar de ello.
Ahora bien el estado venezolano
produce, c no lo que debe pero produce y es bajo los canales de distribución que
ha creado que se provee al pueblo de tales productos, hoy la coyuntura y la guerra económica
ha llevado al gobierno a que los insumos regulados provengan de donde provengan
pasen a otro canal de distribución como son los CLAPS y con ello desmontar el
aparato que muy a bien han importado de países vecinos como el bachaqueo.
Criticar esta iniciativa es
bizarro, calificarlo de un sistema de discriminación social, política y
económica es aberrante y desdice el poco margen de racionalidad existente en
muchos interlocutores. Decir o escribir que el gobierno de Maduro no es
socialista ni chavista es afirmar que el gobierno de nuestro comandante eterno
si lo fue y con ello la crítica lejos de ser crítica pasa a ser un burdo
comentario de alguien que no atiende a sus propios errores y creatividad
intelectual, muchos de los espacios expropiados dan mucho elemento para el análisis,
banalizarlos y calificarlos de improductivos sin llegar a la raíz del problema es
tarea fácil.
El gobierno revolucionario de Nicolás
Maduro ha sido asediado muchos antes de ganar las elecciones, ha cometido
desaciertos y aciertos, como lo hizo nuestro eterno comandante, mas no por ello
debemos atacarlo y criminalizarlo, existen espacios para la crítica si consideramos
que esos espacios están cerrados para las críticas debemos buscar el mecanismo
para que nuestro reclamos sean escuchados, pero lo que no podemos es hacerle el juego a quienes nos han excluidos y
adversados por siempre en lo político y lo ideológico.
Todo esfuerzo por llevarle
alimento al pueblo ante esta arremetida de la derecha es un logro, el cual
debemos mejorarlos en la medida en que lo insertemos en cada rincón de nuestro país,
hablamos de una canal de distribución de alimentos, en circunstancias muy adversas,
no se puede llegar a todo el país en lo inmediato, en la medida en que
avancemos iremos perfeccionándolo, lo que no podemos es atacarlo en su fase de implementación.
NO HAY NADA MÁS EXCLUYENTE QUE SER POBRE.
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