La muestra, realizada por el Instituto Francés de Opinión Pública (IFOP), revela que tras la abrupta caída en los sondeos de abril, el jefe de Estado cuenta ahora con 29 por ciento de aceptación.
De acuerdo con los analistas de la firma, una de las razones de esta alza es la aprobación de la ley que establece el derecho de matrimonio entre personas del mismo sexo.
El IFOP precisa, asimismo, que la imagen del mandatario mejoró un poco tras la conferencia de prensa ofrecida el 16 de mayo, con motivo de su primer aniversario en el Palacio del Elíseo.
Segúnla encuesta, publicada en el Journal du Dimanche, el primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, también subió ligeramente en la aprobación popular y pasó de 30 a 33 puntos.
No obstante, aún el índice de rechazo a la gestión gubernamental es elevado, con 79 unidades, entre ellos 23 por ciento de los propios simpatizantes del Partido Socialista.
La principal crítica a Hollande es la incapacidad de su administración para frenar el desempleo, en constante crecimiento desde hace 22 meses.
En la actualidad el paro afecta a más de tres millones 220 mil personas en edad laboral, pero si se suman a quienes trabajan a tiempo parcial o con salarios reducidos, la cantidad rebasa los cinco millones, cifras nunca antes registradas en el país galo.
También le achacan los malos resultados de la economía, que entró en fase de recesión tras dos trimestres consecutivos de contracción del Producto Interno Bruto (PIB).
El ejecutivo debió renunciar a la mayor parte de las proyecciones fijadas para 2013, entre ellas un crecimiento de 0,8 puntos y la reducción del déficit fiscal al tres por ciento del PIB, como lo exigen los tratados europeos.
Hollande anunció que en 2014 el presupuesto del Estado será aún más restrictivo con el propósito de lograr el equilibrio financiero, lo cual hace prever mayor desempleo en el sector público y menos gasto social.
jf/ami
0 comentarios:
Publicar un comentario