MENSAJE URGENTE A VENEZUELA
Por: Fernando Buen Abad Domínguez
Hay que generar una movilizacióncomunicacional mundial. Nadie me lo pidió pero propongo que, masivamente, nospongamos a mandar recaditos, mensajes y comunicados urgentes al pueblo revolucionariode Venezuela.
Nada mal estaría decirle cosas al oído, cosas de hermanos, deamor fraterno, de necesidad y de urgencia. Por ejemplo: ¡Venezolanos,camaradas! sus votos también nos representan en Bolivia, en Cuba, en Ecuador,en Nicaragua, en Colombia, en México… salgan y voten por todos nosotros, salgany triunfen una vez más, con su fortaleza moral, con su revolución a galope,salgan como nunca y triunfen como se debe. Expresar la solidaridadinternacional no implica ignorar ni anular los debates internos que puedentener un valor sustancial pero que no deben impedir multiplicar nuestrasfuerzas apoyados, también, en la movilización de países hermanos. Que nadie sequede en su casa que nadie eluda su responsabilidad de votar por todosnosotros. ¿Es mucho pedir?
Nadie me lo pidió pero siento lanecesidad y la premura (acaso por impotencia) de llamar a quienes pueda y comopueda para convencerlos de conectarse con Venezuela. Convencerlos de saberla yde sentirla, convencerlos de entenderla y acompañarla con lo que se tenga ycomo se debe. Convencerlos, en fin, de hacer saber a la revolución venezolanacuánto nos importa y cuánto la necesitamos triunfante y contundente. No estaríamal. Veamos.
Venezuela ha llevado la lucha de clases aun plano más avanzado que había sido silenciado de mil maneras. Casi seríanecesario agradecer a sus agresores y golpistas la diversidad de canalladas, lavelocidad y la abyección invertidas para organizar sus ataques porque eso nossimplifica las tareas, nos ahorra esfuerzos y nos esclarece el camino de larevolución. Hoy es extraordinariamente claro que la Revolución Venezolana nosbeneficia a todos (a todos los proletarios que buscamos la unidad) para acortardistancia entre la realidad que nos abruma y la conciencia que necesitamos paraactuar correctamente. El pueblo revolucionario de Venezuela se ha propuestodestruir a la burguesía eso es un gran ejemplo, es una inspiración y es unaconquista magnífica. Es preciso que se expanda y se profundice. Voten todos.
Veamos. Los logros ejemplares de larevolución venezolana en materia de salud, vivienda, educación y trabajo… son,entre mil cosas, un regalo y una escuela que, en el tiempo brevísimo que llevala revolución, ya produjo beneficios directos e indirectos a muchos pueblos ycamaradas latinoamericanos (y no solamente). La lista es enorme si sólo tomamoscomo ejemplo el aporte de las “Misiones” que abren los ojos venciendoenfermedades, que abren los ojos del alma y del pensamiento.
Veamos. Venezuela con su revolución socialistanos ha regalado la certeza definitiva de que la lucha por la dignidad conduceal triunfo de las aspiraciones democráticas más profundas y sinceras de lospueblos. La palabra de esta Venezuela revolucionaria es hoy en el mundo lapalabra de la esperanza y del compromiso que anima a muchos y que despierta alos pueblos. Le debemos a esta Venezuela revolucionaria su fortaleza simbólica,su riqueza histórica, sus valores combativos y su moral guerrera que, pese alos pesares, endógenos y exógenos, no pierde el rumbo y no pierde la calma.
Veamos. Las cifras de Venezuela, aun enel momento de la peor crisis económica mundial (ocasionada por el capitalismo ysus perversiones) sostienen su ritmo real de crecimiento y sus programasfundamentales de desarrollo revolucionario. Ningún país europeo con lapetulancia de llamarse “primer mundo” pude decir (a estas horas) lo mismo.Venezuela ha dado pasos firmes hacia la planificación de la economíasubordinada al beneficio colectivo y hacia la subordinación de la política a lavoluntad democrática y la justicia social. Hay cifras a raudales. Muy pocospueden presumir lo mismo.
Por esto y más, propongo que nospropongamos la tarea de hacer saber a Venezuela cuánto nos importa y cuánto devital tiene para todos nosotros un triunfo democrático contundente en suselecciones próximas. Hacerle saber, de mil maneras, qué aprendimos, quérecibimos y qué agradecemos de su esfuerzo, talento y ejemplaridadrevolucionaria. Hacerles saber que sus triunfos nos hacen falta en la medida enque ellos hacen lo que muchos no podemos. Por ahora.
Pero se trata de hacerlo saber paraanimar a los convencidos, a los dudosos y a los no convencidos también. Paramovilizar una corriente mundial de aliento que sea contagioso y que saque a todosa votar ante las elecciones venideras. Que se logren cifras record, que laafluencia sea inédita. Que salgan todos y que voten todos acompañadosfraternalmente por cientos de pueblos hermanos que se saben beneficiados yco-responsables por el ascenso de la revolución y su multiplicación mundial.Que logremos hablar al corazón de cada venezolano y también al pensamiento decada venezolano que lleva a hombros el trabajo de profundizar la revoluciónpara que sepa cuánto vale para nosotros fuera de su país y cuánto nos importasu obra colectiva y socialista. Que sienta, pues, en sus manos (a la hora devotar) la responsabilidad histórica y el privilegio de tener el pulso hermanode millones de almas solidarias en todo el mundo.
Se trata de abrir un espacio para unacampaña internacionalista que le cuente a Venezuela la importancia de sus votosy cuánto nos urge, en cada país, su triunfo ejemplar en las eleccionespróximas. Pedir por todos los medios mensajes para el pueblo revolucionario deVenezuela, que le cuenten por qué es tan valioso su voto y por qué larevolución venezolana es responsabilidad internacional. Se trata de encontraruna y mil maneras de hacer llegar mensajes… y luego replicarlos para que semuestren en todos los medios alternativos y comunitarios, prensa obrera, prensade movimientos sociales, prensa universitaria… blogs, páginas, twitters… Laidea es generar una movilización comunicacional que llegue a todos (incluidoslos indecisos) para salir a votar porque un continente entero acompaña laselecciones y depende también de su triunfo.
¿Nos ayudas?
buenabad@gmail.com
Por: Fernando Buen Abad Domínguez
Hay que generar una movilizacióncomunicacional mundial. Nadie me lo pidió pero propongo que, masivamente, nospongamos a mandar recaditos, mensajes y comunicados urgentes al pueblo revolucionariode Venezuela.
Nada mal estaría decirle cosas al oído, cosas de hermanos, deamor fraterno, de necesidad y de urgencia. Por ejemplo: ¡Venezolanos,camaradas! sus votos también nos representan en Bolivia, en Cuba, en Ecuador,en Nicaragua, en Colombia, en México… salgan y voten por todos nosotros, salgany triunfen una vez más, con su fortaleza moral, con su revolución a galope,salgan como nunca y triunfen como se debe. Expresar la solidaridadinternacional no implica ignorar ni anular los debates internos que puedentener un valor sustancial pero que no deben impedir multiplicar nuestrasfuerzas apoyados, también, en la movilización de países hermanos. Que nadie sequede en su casa que nadie eluda su responsabilidad de votar por todosnosotros. ¿Es mucho pedir?
Nadie me lo pidió pero siento lanecesidad y la premura (acaso por impotencia) de llamar a quienes pueda y comopueda para convencerlos de conectarse con Venezuela. Convencerlos de saberla yde sentirla, convencerlos de entenderla y acompañarla con lo que se tenga ycomo se debe. Convencerlos, en fin, de hacer saber a la revolución venezolanacuánto nos importa y cuánto la necesitamos triunfante y contundente. No estaríamal. Veamos.
Venezuela ha llevado la lucha de clases aun plano más avanzado que había sido silenciado de mil maneras. Casi seríanecesario agradecer a sus agresores y golpistas la diversidad de canalladas, lavelocidad y la abyección invertidas para organizar sus ataques porque eso nossimplifica las tareas, nos ahorra esfuerzos y nos esclarece el camino de larevolución. Hoy es extraordinariamente claro que la Revolución Venezolana nosbeneficia a todos (a todos los proletarios que buscamos la unidad) para acortardistancia entre la realidad que nos abruma y la conciencia que necesitamos paraactuar correctamente. El pueblo revolucionario de Venezuela se ha propuestodestruir a la burguesía eso es un gran ejemplo, es una inspiración y es unaconquista magnífica. Es preciso que se expanda y se profundice. Voten todos.
Veamos. Los logros ejemplares de larevolución venezolana en materia de salud, vivienda, educación y trabajo… son,entre mil cosas, un regalo y una escuela que, en el tiempo brevísimo que llevala revolución, ya produjo beneficios directos e indirectos a muchos pueblos ycamaradas latinoamericanos (y no solamente). La lista es enorme si sólo tomamoscomo ejemplo el aporte de las “Misiones” que abren los ojos venciendoenfermedades, que abren los ojos del alma y del pensamiento.
Veamos. Venezuela con su revolución socialistanos ha regalado la certeza definitiva de que la lucha por la dignidad conduceal triunfo de las aspiraciones democráticas más profundas y sinceras de lospueblos. La palabra de esta Venezuela revolucionaria es hoy en el mundo lapalabra de la esperanza y del compromiso que anima a muchos y que despierta alos pueblos. Le debemos a esta Venezuela revolucionaria su fortaleza simbólica,su riqueza histórica, sus valores combativos y su moral guerrera que, pese alos pesares, endógenos y exógenos, no pierde el rumbo y no pierde la calma.
Veamos. Las cifras de Venezuela, aun enel momento de la peor crisis económica mundial (ocasionada por el capitalismo ysus perversiones) sostienen su ritmo real de crecimiento y sus programasfundamentales de desarrollo revolucionario. Ningún país europeo con lapetulancia de llamarse “primer mundo” pude decir (a estas horas) lo mismo.Venezuela ha dado pasos firmes hacia la planificación de la economíasubordinada al beneficio colectivo y hacia la subordinación de la política a lavoluntad democrática y la justicia social. Hay cifras a raudales. Muy pocospueden presumir lo mismo.
Por esto y más, propongo que nospropongamos la tarea de hacer saber a Venezuela cuánto nos importa y cuánto devital tiene para todos nosotros un triunfo democrático contundente en suselecciones próximas. Hacerle saber, de mil maneras, qué aprendimos, quérecibimos y qué agradecemos de su esfuerzo, talento y ejemplaridadrevolucionaria. Hacerles saber que sus triunfos nos hacen falta en la medida enque ellos hacen lo que muchos no podemos. Por ahora.
Pero se trata de hacerlo saber paraanimar a los convencidos, a los dudosos y a los no convencidos también. Paramovilizar una corriente mundial de aliento que sea contagioso y que saque a todosa votar ante las elecciones venideras. Que se logren cifras record, que laafluencia sea inédita. Que salgan todos y que voten todos acompañadosfraternalmente por cientos de pueblos hermanos que se saben beneficiados yco-responsables por el ascenso de la revolución y su multiplicación mundial.Que logremos hablar al corazón de cada venezolano y también al pensamiento decada venezolano que lleva a hombros el trabajo de profundizar la revoluciónpara que sepa cuánto vale para nosotros fuera de su país y cuánto nos importasu obra colectiva y socialista. Que sienta, pues, en sus manos (a la hora devotar) la responsabilidad histórica y el privilegio de tener el pulso hermanode millones de almas solidarias en todo el mundo.
Se trata de abrir un espacio para unacampaña internacionalista que le cuente a Venezuela la importancia de sus votosy cuánto nos urge, en cada país, su triunfo ejemplar en las eleccionespróximas. Pedir por todos los medios mensajes para el pueblo revolucionario deVenezuela, que le cuenten por qué es tan valioso su voto y por qué larevolución venezolana es responsabilidad internacional. Se trata de encontraruna y mil maneras de hacer llegar mensajes… y luego replicarlos para que semuestren en todos los medios alternativos y comunitarios, prensa obrera, prensade movimientos sociales, prensa universitaria… blogs, páginas, twitters… Laidea es generar una movilización comunicacional que llegue a todos (incluidoslos indecisos) para salir a votar porque un continente entero acompaña laselecciones y depende también de su triunfo.
¿Nos ayudas?
buenabad@gmail.com
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