La perseverancia y voluntad política. Pioneros por el Comunismo “Seremos como el Che”
Por: Ricardo Abud
“Seremos como el Che” grito de los pioneros cubanos y muy difundido en los espacios políticos de nuestra América. Palabras que encierran el clamor de dignidad de un hombre que lo entregó todo por sus ideales, pasión y amor hacia la Revolución, en una lucha mesurada en contra de los enemigos del pueblo excluido latinoamericano.
La grandeza del Guerrillero Heroico es difícil creer que pueda albergarse en un sólo hombre, en el alma humana. Cuántas veces hemos escuchado esa frase sin entender con certeza su significado, hoy el horizonte nos enseña la claridad política de Ernesto Che Guevara y la inmortalidad de su pensamiento y nos abre el camino para seguir su ejemplo.Un hombre capaz de luchar desinteresadamente por todos aquellos excluidos, por lo que se convirtió en el hombre de ayer, hoy y siempre. No hay límites en su trecho a la inmortalidad. Su espíritu indomable y ansias de libertad son el marco referencial del afán de un hombre que siempre perseveró y nunca declinó su voluntad política para honrarnos de libertad.
Muchos compatriotas hoy no tienen idea de la magnitud del legado político que nos dejo el Che. Distribuyen a cuenta gotas un pensamiento que para ellos es indiferente, sólo siguen el instinto de su voracidad pervertida y distorsionada en paralelismos de grandeza individual, inmutados ante el pensamiento crítico que la Revolución reclama. Sumergidos en pasiones cargadas de banalidad extrema, se enriquecen de un individualismo prematuro y ausente del pensamiento revolucionario, sólo entienden la razón del bienestar personal, el poder únicamente lo alimentan para sus sórdidas pretensiones de intrascendencia, son esclavos de la envidia de una vida efímera en la Cuarta república. Revolucionarios por conveniencia.
El ejercicio político que hoy reclama la Patria bolivariana, está estrechamente vinculado en la construcción del Socialismo del siglo XXI, una sociedad donde impere el bienestar común y la justicia social. Qué fácil de entender el mensaje y qué difícil llevarlo a la práctica por aquellos que juran compromiso político con la Patria. Desde las trincheras que le han asignado la Revolución sucumben al mensaje neoliberal y dependiente del consumismo, fortaleciendo espacios para la disidencia.
En el otro lado de la acera, un pueblo que lucha día a día por una organización política, que permita, de manera consciente, estructurar unidades organizativas con deficientes niveles de planificación para cumplir las metas trazadas en devenir de los proyectos que nos orienten hacia la emancipación soberana de un colectivo revolucionario el cual sí quiere ascender en el proceso evolutivo de una sociedad mejor concebida y orientada hacia la inclusión total del ser humano..
El ejercicio político en las bases, por tanto, es diferente y de mayor compromiso con la Revolución y el proyecto de cambio que encarna nuestro Comandante presidente, transformándose en un verdadero ejercicio de democracia directa y participativa, donde la filosofía de ser gira hacia lo colectivo sin la intermediación de “líderes” colaterales que distorsionan la naturaleza social de este modelo organizativo.
Nuestro pueblo hoy lucha cada día, de manera consciente, con perseverancia y una clara voluntad política de colectivo, para poder sustituir la cultura política representativa que hoy se arraiga en muchos “líderes”, representatividad que para muchos de nosotros es igual a clientelismo y vicios propios atados al ejercicio del poder de las cúpulas impuestas y seudorevolucionarias.
La perseverancia y voluntad política de nuestro pueblo no se podrá desvanecer porque es auténtica, hoy interioriza ese sentimiento de amor tan grande para fortalecerse sus luchas por una vida digna en el camino que nos conducirá a la construcción del Socialismo.
No hay nada más excluyente que ser pobre.
Patria, Socialismo o Muerte…
Venceremos.
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