La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) expresó el deseo de reanudar su cooperación con Bolivia, más de seis años después de haber sido expulsada por la administración de Evo Morales, informó el Gobierno de facto.
"Agradecido por la reunión que sostuvimos en USAID-LAC con John Barsa y su equipo para tratar varios temas relativos a Bolivia, trabajo conjunto que nos toca por hacer. Hay interés por apoyar a nuestra patria, avanzamos", publicó en su cuenta de Twitter el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, refiriéndose al administrador adjunto de USAID para América Latina y el Caribe.
Murillo se reunió con Barsa en Washington como parte de un creciente acercamiento de Bolivia hacia Estados Unidos desde la instalación del régimen de facto de Jeanine Áñez, el 12 de noviembre, en sucesión del derrocado gobierno de Morales.
El expresidente indígena, conocido por su duro discurso antiimperialista, echó a la USAID el 1 de mayo de 2013, casi cinco años después de haber expulsado al embajador y a la agencia antidrogas norteamericana, DEA.
Morales argumentó que la cooperación económica y social de la USAID ocultaba actividades de injerencia en la política interna.
La restauración de las relaciones entre La Paz y Washington fue una de las primeras tareas emprendidas por la canciller de facto Karen Longaric, quien designó a un embajador extraordinario ante el Gobierno estadounidense con objeto de preparar el camino de un eventual intercambio de representantes plenipotenciarios.
Desde la expulsión mutua de embajadores de 2008, las relaciones entre Bolivia y Estados Unidos están a nivel de encargados de negocios.
Sputnik
"Agradecido por la reunión que sostuvimos en USAID-LAC con John Barsa y su equipo para tratar varios temas relativos a Bolivia, trabajo conjunto que nos toca por hacer. Hay interés por apoyar a nuestra patria, avanzamos", publicó en su cuenta de Twitter el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, refiriéndose al administrador adjunto de USAID para América Latina y el Caribe.
Murillo se reunió con Barsa en Washington como parte de un creciente acercamiento de Bolivia hacia Estados Unidos desde la instalación del régimen de facto de Jeanine Áñez, el 12 de noviembre, en sucesión del derrocado gobierno de Morales.
El expresidente indígena, conocido por su duro discurso antiimperialista, echó a la USAID el 1 de mayo de 2013, casi cinco años después de haber expulsado al embajador y a la agencia antidrogas norteamericana, DEA.
Morales argumentó que la cooperación económica y social de la USAID ocultaba actividades de injerencia en la política interna.
La restauración de las relaciones entre La Paz y Washington fue una de las primeras tareas emprendidas por la canciller de facto Karen Longaric, quien designó a un embajador extraordinario ante el Gobierno estadounidense con objeto de preparar el camino de un eventual intercambio de representantes plenipotenciarios.
Desde la expulsión mutua de embajadores de 2008, las relaciones entre Bolivia y Estados Unidos están a nivel de encargados de negocios.
Sputnik
0 comentarios:
Publicar un comentario