"Lamentablemente, Washington no piensa en absoluto renunciar a una política que busca derrocar al Gobierno legítimo. Lo declaran sin ambages y, aunque han moderado algo su retórica, no cejan en el empeño de desestabilizar a Venezuela desde dentro", afirmó la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova.
Paralelamente a ello, añadió, se van ampliando las sanciones ilegales.
"Las restricciones unilaterales impuestas por la Casa Blanca, sin acortarles el camino al poder a las fuerzas antigubernamentales, han empeorado mucho la situación económica y humanitaria en el país", afirmó la diplomática rusa.
"A diferencia de las empresas que son capaces de adaptarse de alguna manera a las sanciones, la población civil —gente de a pie, especialmente personas en una situación difícil, con bajos ingresos, enfermos, niños— no lo pueden y lo pasan muy mal", apuntó.
Desde 2008, el Gobierno estadounidense ha sancionado a más de 200 funcionarios venezolanos entre los que se encuentran militares, magistrados, rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE), ministros, diputados, constituyentes y el propio presidente Nicolás Maduro.
Todos ellos han sido acusados de estar involucrados en presuntos actos de corrupción, narcotráfico y violaciones a los derechos humanos.
EEUU redobló sus sanciones contra Venezuela como forma de presión contra el Gobierno de Nicolás Maduro, al que considera ilegítimo.
Tendencia positiva en la situación en Venezuela
Además, la diplomática indicó que Rusia constata una tendencia positiva en el desarrollo de la situación en Venezuela y expresó la esperanza de que vaya afianzando.
"La situación sigue siendo complicada, desde luego, pero se vislumbra la esperanza de que se encuentre una solución política, ante todo, gracias a la labor de la Mesa Nacional de Diálogo", declaró Zajárova.
La representante de la Cancillería rusa señaló que las negociaciones en curso "son sustanciales, cada vez más inclusivas".
"Una de las cuestiones centrales de la agenda es determinar los vectores, las modalidades del futuro proceso electoral. Si se consensúan, será posible organizar el próximo año las elecciones parlamentarias en Venezuela en consonancia con la Constitución del país, las normas y los principios democráticos", dijo.
Zajárova constató asimismo "el creciente rechazo hacia posturas conflictivas por parte de la sociedad venezolana, tanto la población como los sectores políticos cada vez más amplios, incluida la oposición".
Según las encuestas recientes, recordó, el 67% de los venezolanos se muestran dispuestos a acudir a las urnas, y un 72% consideran incorrecto boicotear las futuras elecciones.
"Es una tendencia positiva y confiamos en que se mantenga", subrayó.
El 18 de noviembre, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, tuvo un primer encuentro en el palacio de Miraflores (sede de Gobierno) con los dirigentes de los partidos de oposición que integran junto a su Gobierno la Mesa Nacional de Diálogo.
La mesa se instaló el pasado 16 de septiembre, pero en ella no participan los partidos con mayor representación en la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral, de mayoría opositora).
Según el presidente venezolano, el diálogo con diversos sectores de la oposición avanza hacia la convivencia y la estabilidad del país.
Venezuela atraviesa una crisis política que se intensificó en enero pasado cuando el diputado opositor Juan Guaidó, respaldado por EEUU y otros 50 países, se declaró "presidente encargado" del país, hecho que el Gobierno venezolano tildó de un intento de golpe de Estado.
Sputnik
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