La exasesora del gobernante republicano, quien sirvió en esa posición hasta agosto pasado, dará su testimonio a los comités de Inteligencia, Asuntos Exteriores, y Supervisión y Reforma, los grupos parlamentarios que están conduciendo esa indagación.
Tal pesquisa, que podría llevar a una acusación formal contra Trump y a realizar un juicio político en el Senado en busca de su destitución, gira en torno a los llamados del gobernante a Ucrania para que investigue al exvicemandatario y candidato presidencial demócrata Joe Biden.
Mientras Trump asegura que sus peticiones a Kiev responden a un interés en luchar contra la corrupción, los demócratas sostienen que se tratan de un abuso del cargo, porque presiona a un país extranjero para que interfiera en las elecciones de 2020.
Según la cadena de televisión NBC News, Hill planea decirle al Congreso que Rudy Giuliani, abogado personal de Trump, y el embajador norteamericano ante la Unión Europea (UE), Gordon Sondland, eludieron al Consejo de Seguridad Nacional y el proceso normal de la Casa Blanca para llevar a cabo una política en la sombra sobre Ucrania.
El medio, que citó a una persona familiarizada con el posible testimonio de la exconsejera, indicó que la aparición de Hill en el Capitolio ha avivado el miedo entre las personas cercanas al presidente, dado el papel central que ella desempeñó en la supervisión de la política de Rusia y Ucrania en la mayor parte de la administración Trump.
Mensajes de texto publicados recientemente por el Congreso mostraron que Sondland, Giuliani y el exenviado de Estados Unidos para Ucrania Kurt Volker trabajaron para facilitar el objetivo del mandatario republicano de lograr que su homólogo del país europeo, Volodymyr Zelensky, se comprometiera a investigar a Biden.
Las comunicaciones entre ellos sugieren que los funcionarios intentaron hacer que una posible visita de Zelensky a la Casa Blanca dependiera del lanzamiento de esa pesquisa.
De acuerdo con sus abogados, Sondland testificará este jueves en la investigación de juicio político, luego de que la administración Trump le ordenó faltar a una comparecencia en el Congreso prevista para el pasado martes.
Esa figura, un rico magnate hotelero que donó un millón de dólares al comité inaugural de Trump antes de ser designado embajador ante la UE, es considerado un testigo clave en la pesquisa, dados los mencionados mensajes de texto y la aparición de su nombre en una denuncia realizada por un miembro de la comunidad de inteligencia.
tgj/mar
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