Organizaciones del sindicalismo combativo y trabajadores precarizados y desocupados organizan esta jornada en la que se esperan al menos 20 cortes de calles y rutas y se movilizarán a Plaza de Mayo, a unos pasos de la Casa Rosada, por la reapertura de las negociaciones salariales, la actualización del salario por la inflación y por trabajo genuino y un aumento de emergencia a jubilados.
En el conocido puente Pueyrredón, que conecta a la localidad bonaerense de Avellaneda con la capital, partirá una de las agrupaciones sociales y ya se siente desde horas tempranas el despliegue de la fuerza pública con unas enormes vallas para impedir el corte de ruta.
Se espera otra jornada movida de efervescencia social, con epicentro en esta capital, donde está previsto además sobre las 16:00 hora local una marcha desde la sede de la Unión Industrial Argentina hacia la emblemática Plaza de Mayo.
'Llamamos a toda la clase trabajadora, ocupados y desocupados, a movilizarse y a estar en las calles, porque cada trabajador debe estar con su derecho a reclamar intacto', declaró la víspera en una rueda de la prensa Alejandro Crespo, referente del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (Sutna).
Con problemas sociales latentes, que han generado más de tres millones de indigentes, una economía en crisis y recesión y la vida cada vez más difícil, las organizaciones tomarán las calles este martes también en provincias como Corrientes, Entre Ríos, Córdoba, Mendoza, La Rioja, Tucumán y Santiago del Estero.
Argentina atraviesa por otro momento complejo en su economía, con un país endeudado, un dólar inestable que cada día devalúa el peso nacional, caída del consumo y constante alzas en los servicios de primera necesidad.
tgj/may
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