En un comunicado respaldado por todos sus miembros, indica que esas acciones discriminatorias contra la economía y la sociedad de Venezuela, que incluye congelación de bienes y castiga a las personas que apoyan al presidente, Nicolás Maduro, alcanzó el clímax de la violencia contra ese país y el derecho internacional.
'Son parte de la continua política de agresión imperial, iniciada por el presidente Barack Obama y que hoy Donald Trump pretende continuar', denuncia.
Estados Unidos, añade, castiga al pueblo venezolano a pesar de la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU, que no quiso sumarse a las intenciones de Washington de derrocar al gobierno actual y establecer uno subordinado y obediente que le permita explotar los ricos campos petroleros venezolanos y otros recursos de este país.
Expresa que Washington no escatima medios para influir en el diálogo interno fomentado por el ejecutivo nacional y para alimentar la hostilidad de algunos grupos de oposición de derecha como un factor para desestabilizar el país.
Con ello, acota, demuestra fehacientemente que el interés real de ese intervencionismo es derrocar al gobierno legítimo de Nicolás Maduro, presidente de la República Bolivariana de Venezuela.
'La Red de Defensa de los Derechos Humanos, Capítulo Serbia, expresa su apoyo y solidaridad con el noble y valiente pueblo venezolano, enfrentado a un chantaje y coerción inhumanos, pero decidido a perseverar en la defensa de la libertad, soberanía e independencia de su país', resalta el documento.
Concluye con clamar por el fin del fascismo y por la libertad de la humanidad y subraya su compromiso de siempre con los valores generales de la civilización.
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