Ante la emergencia social generada tras el ataque tecnológico a la central hidroeléctrica Simón Bolívar (El Guri), las autoridades priorizan el funcionamiento de los servicios médicos y el abasto de agua potable a enclaves priorizados y comunidades, indicó el titular.
Asimismo, el Ejecutivo bolivariano dará atención primordial al suministro de gas y a la entrega de alimentos a las familias a través de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción, mecanismo creado por el Estado para la distribución de insumos alimenticios a precios solidarios.
La cantidad de combos a distribuir en todo el territorio nacional podría ascender hasta 10 millones, con productos como arroz, azúcar, aceite, leche en polvo, harina de maíz y pasta alimenticia, entre otros, precisó Menéndez e entrevista a la cadena multinacional Telesur.
El ministro de Planificación estimó que las pérdidas económicas asociadas al ataque al sistema electroenergético nacional serían comparables con las del paro petrolero promovido por la oligarquía en 2002, el cual significó un daño de 20 mil millones de dólares.
Destacó además la actitud cívica mantenida por el pueblo venezolano frente a las dificultades generadas por el sabotaje a la segunda hidroeléctrica de mayor envergadura en América Latina y cuarta a nivel mundial, que abastece de energía a cerca del 80 por ciento del país.
jf/wup
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