Irán concluyó con éxito maniobras navales realizadas en el Estrecho de Ormuz, con la participación de 100 buques de guerra, apoyados por helicópteros y aviones de vigilancia.
Teherán culiminó el operativo Velayat-97, iniciado desde el viernes pasado, cuyo objetivo fue hacer más eficiente la coordinación de la defensa naval en caso de un ataque a sus aguas territoriales en el Estrecho de Ormuz, el Golfo de Omán y las cuencas norteñas del Océano Indico.
Según la agencia iraní Tashim, estas operaciones de alta prioridad estratégica también buscan garantizar la seguridad de los suministros de energía de todo el mundo, entre estos los de petróleo, por donde pasa alrededor de un tercio del crudo que se comercia por mar.
Las maniobras se realizaron en cuatro fases que incluyeron desfiles navales, simulación de una guerra naval, ofensivas marítimas y terrestres con el fin de practicar la recaptura de los territorios ocupados por el enemigo y el lanzamiento de varios tipos de misiles y torpedos.
En estas operaciones, la Marina persa hizo uso de drones por primera vez en su historia. Asimismo, hizo un lanzamiento de misiles tierra-tierra desde un submarino.
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