Un informe presentado por la organización Defense for Children International reveló este miércoles que Israel ha asesinado a 56 niños y adolescentes palestinos en Gaza durante 2018.
Medios locales reseñaron la perenne presencia de fuerzas de ocupación israelíes, las cuales realizan detenciones y dispersan manifestaciones con gas lacrimógeno y el uso excesivo de la fuerza.
En respuesta, el Gobierno de Israel justifica su violencia alegando que los participantes de las protestas usan piedras contra las autoridades. Sin embargo, los palestinos más jóvenes se encuentran en situación de vulnerabilidad ante los ataques.
Around 4 pm on January 11, Abdel Raouf Salha, 13, was struck in the head by an Israeli-fired tear gas canister in Jabalia, North Gaza. He was 150 meters from the Gaza perimeter fence. He sustained skull fractures and severe brain trauma. He died around 5 pm on January 14. pic.twitter.com/tuXx6XVdxt— Defense for Children (@DCIPalestine) 16 de enero de 2019
Muertes de niños y jóvenes palestinos
El pasado 11 de enero, Abdel Raouf Salha, de 13 años de edad, fue impactado en la cabeza con una lata de gas lacrimógeno lanzado por soldados de Israel en Jabalia, al norte de Gaza. Los médicos determinaron fracturas de cráneo y trauma cerebral severo, lo que le ocasionó la muerte tres días después.
Asimismo, el 8 de febrero Hassan Nabil Ahmad Nofal, con 16 años de edad, recibió un golpe en la cabeza con un envase de gas lacrimógeno. Estaba cerca del campamento de refugiados de Al-Bureij, en Gaza.
Por otro lado, Hassan Iyad Abdel Fattah Shalbi, también de 13 años de edad, participaba en protestas cerca del perímetro de Gaza en Khan Younis, cuando recibió un proyectil en el pecho y salió por la espalda. Poco después murió.
Hamza Mohammad Rushdi Ishteiwi, de 17 años de edad, fue alcanzado en el cuello con una munición. Según reportes, estaba sentado cerca de la barrera perimetral de Gaza cuando lo asesinaron.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) indicó que el ejército israelí ejecutó a más de 295 palestinos e hirió a más de 6.000 con armas de fuego desde que iniciaron las protestas de la Gran Marcha del Retorno, el 30 marzo de 2018, contra el bloqueo económico perpetrado por Israel.
Las detenciones forman parte de la dura situación que enfrentan los palestinos y estiman que el 75 por ciento de los jóvenes privados de libertad experimentó violencia física después del arresto.
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