Por: Ulises Canales
El Cairo, 24 nov (PL) La determinación de miles de manifestantes a continuar sus protestas para que renuncie la Junta Militar continúa dominando hoy el clima político de Egipto, donde crece la incertidumbre por un posible aplazamiento de las elecciones parlamentarias.
El despliegue de blindados del Ejército en El Cairo, básicamente alrededor del Ministerio del Interior, y los violentos enfrentamientos callejeros en la norteña ciudad de Alejandría aportaron los episodios más inquietantes de la que ya llaman aquí "segunda revolución".
Fuerzas policiales dispararon una andanada de gases lacrimógenos y balas de caucho -algunas fuentes hablan de balas reales- contra inconformes que se mantenían en las calles de Alejandría y respondieron lanzando piedras y artefactos explosivos caseros (cócteles Molotov).
Entretanto, en la plaza Tahrir, epicentro de las revueltas populares de enero y febrero pasados que llevaron al derrocamiento de Hosni Mubarak, las escaramuzas también cobraron en intensidad en las últimas horas, causando algunos heridos de consideración esta madrugada.
Las bocinas de las motos que asisten a heridos, las sirenas de ambulancias y la incesante carrera de personas trasladando heridos a hospitales de campaña en Tahrir o a clínicas de la ciudad, reflejan un ambiente de alarma y nerviosismo, además de la obvia confrontación.
Activistas opuestos al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA) aseguraron que un médico que atendía a heridos en Tahrir murió el jueves en los alrededores de la plaza, donde también cientos de personas resultaron lesionadas.
Datos del Ministerio egipcio de Salud confirmaron 36 muertos en los enfrentamientos de los últimos seis días, así como más de dos mil heridos de diversa consideración, incluidos 180 policías, según apuntó el Ministerio del Interior.
Esa dependencia, que permanece custodiada por soldados y blindados del Ejército, negó haber disparado gases prohibidos contra los manifestantes, mientras el CSFA emitió un comunicado en el que deploró y se disculpó por los incidentes en El Cairo y el resto del país.
La Coalición de Jóvenes de la Revolución (CJR) y otras organizaciones que participan en la demostración contra la Junta Militar convocaron a otra "marcha del millón" que denominarán "viernes por la justicia para los mártires", en alusión a los fallecidos.
En un comunicado difundido aquí, la CJR señaló que las demandas básicas de la movilización de mañana serán que se nombre un gobierno de salvación nacional, se procese judicialmente a oficiales responsables de la represión y se desmantelen las Fuerzas Centrales de Seguridad.
Dichos reclamos se articularán entre todos los movimientos políticos y sociales que convergerán en plazas y calles de Egipto, incluida la Juventud de la Hermandad Musulmana (HM), pese a las críticas contra la jerarquía histórica de esa agrupación islamista.
El Partido Libertad y Justicia, el brazo político de la HM, negoció con el CSFA para evitar se aplacen las elecciones parlamentarias del 28 de noviembre, en las que aparece como favorito para ganar un número significativo de escaños de la Asamblea del Pueblo (cámara baja).
Sin embargo, esa postura calificada por algunos activistas como traición generó críticas de amplios sectores, ya molestos porque la HM también declinó participar en las protestas de Tahrir.
Reportes sin confirmación oficial refirieron que el Ministerio del Interior propuso retrasar en dos semanas el inicio de las elecciones legislativas previstas para realizarse en tres etapas, una variante que manejaron igualmente varios partidos políticos.
El partido Wafd fue una de las formaciones que se pronunciaron el miércoles en ese sentido, tomando en cuenta que la primera fase de los comicios incluye a nueve provincias, incluidas El Cairo y Alejandría, las dos con mayor inestabilidad en los últimos días.
mv/ucl
0 comentarios:
Publicar un comentario