El plan de Bush: Coge el dinero y corre
Por: Oscar Simon
La situación podría compararse al desplome de un castillo de naipes, dónde hagas lo que hagas las cartas van a acabar en desorden tiradas por el suelo.
Coge el dinero y corre!
Desde que oímos por primera vez hablar de las “hipotecas basura” allá en julio de 2007 hasta hoy, los bancos centrales, de la UE, USA Japón y Canadá han inyectado al mercado cerca de un billón de millones de euros, es decir, un uno seguido de 12 ceros. Las inyecciones de liquidez son algo así como cuando a final de mes, en caso de no llegar, tiras de tarjeta de crédito o le pides un dinerillo a un amigo o familiar, con la promesa de devolverlos rápido Tiene narices que sea necesario pasarle pasta a los bancos, cuando se supone que son ellos los que guardan el dinero A cada intervención o inyección como le suelen llamar, algún que otro analista aseguraba que lo peor de la crisis ya había pasado. No es necesario ser muy duro respecto a la capacidad de previsión de los analist(o)s. En 2006 el FMI dirigido en aquel entonces por Rodrigo Rato, y donde se dice que trabajan los mejores economistas del mundo. Pues bien esta especie de sancta santorum del capitalismo global, aseguraba en su informe para el año 2007 que el crecimiento robusto de la economía se mantendría durante el 2008 y casi la mitad del 2009. Craso error! Para esto que pongan a Pitoniso Pito un tipo famoso porque a diez jornadas para el fin de la liga suele acertar el ganador.
Ese dogma llamado neoliberalismo
Milton Friedman murió en Noviembre de 2006 sumo sacerdote del neoliberalismo y de su pacto no escrito, el consenso Washington (WC en sus siglas en inglés) además de admirador de Pinochet. Desde que Friedam murió, el velo que parecía ocultar el desastre que representaba el neoliberalismo se está desgarrando a marchas forzadas. El credo propagado por Friedamn tenía dos dogmas principales. El primero, la capacidad del mercado de equilibrarlo todo y por el cual era necesario eliminar cualquier restricción al mercado, por cualquier restricción se entiende tanto legislaciones como personas. El segundo dogma se encarna en la teoría del goteo, aquella por la cual si los ricos se forran, tendrán que gastar dinero “dando” trabajo a los pobres. Habréis notado el esfuerzo por utilizar palabras relativas a las creencias o religiones, no es casual el friedmanismo nunca se ha sostenido científicamente. De hecho en cualquiera de los lugares donde se aplicaron los dogmas friedmanitas (en todo el planeta y con especial saña en el sur global), la gente se empobreció, bajaron sus niveles de vida y las economías se debilitaron extraordinariamente, sin embargo una minoría se forró. El dogma del goteo de riqueza, aparece absurdo, ya que, resulta evidente que para mejorar el nivel de vida de las clases populares, lo mejor es ayudarles a obtener los recursos necesarios, no subvencionar a los ricos para que estos gasten. (más info en La Doctrina del Shock de Naomi Klein).
La capacidad del mercado para equilibrarlo todo es un cuento y con un cuento se ilustra cómo se ha mantenido durante 18 años esa enorme mentira. Recordáis aquella historia en la que rey estaba en pelotas, pero nadie se atrevía a decirlo, hasta que una niña lo hizo y toda la gente se dio cuenta. Algunos economistas lucharon contra el WC pero los personajes formados en el templo de Chicago o en los Think Tanks subvencionados por banqueros, se habían convertido en las principales autoridades económicas, el keynesianismo no había podido con la crisis de los 70, las políticas de deslocalización, desregulación, privatización generaban millones de empleos precarios, el bloque “comunista” había caído, no comulgar con el WC era sinónimo de anacronismo, el miedo al ridículo se apoderó de muchos economistas, la izquierda perdió sus referentes. Es más para entrar a formar parte de esta nueva religión había que purificarse, era necesario un rito iniciático por el que se abjuraba de cualquier vínculo con la regulación de los mercados, el sector público y demás herejías.
Un "gran" plan
Hoy en los USA debaten si darles 700.000 millones de dólares a los bancos(hace 6 meses en la cumbre contra la crisis alimentaria fue imposible recaudar 30.000 millones contra el hambre), un plan de dos páginas para solucionar la mayor crisis de la historia(!). Este camino no es nuevo en los 80 se dieron 200.000 millones a las cajas de ahorro. Por cierto el jefe del tesoro estadounidense Henry Paulson redactor y futuro ejecutor de un plan destinado a ayudar a las entidades financieras presidía una de ellas antes de acceder al cargo. No era otra que Goldman Sachs, uno de los principales bancos del mundo y también uno de los más afectados. Aquí en el estado español el presidente de la patronal española afirmaba, con gran geta, que es necesario poner un paréntesis al libre mercado y abaratar el despido.
Las crisis son connaturales al capitalismo, en estos momentos la situación podría compararse al desplome de un castillo de naipes, dónde hagas lo que hagas las cartas van a acabar en desorden tiradas por el suelo. No hay manera de atajar la crisis, lo que sí es posible es decidir a que se destinan los recursos si a asegurar un retiro dorado a los ejecutivos, banqueros y empresarios o a políticas sociales. Durante años las políticas económicas han servido exclusivamente a un propósito, enriquecer todavía más a los ricos, estos se han dedicado a pillar la pasta y correr hacia paraísos fiscales. Ahora muchos de los que adoraron al libre mercado empiezan a hablar de proteccionismo o de un regulador mundial, el capitalismo tiene una gran capacidad de reinvención pero eso queda para el próximo mes.
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