José A. Rangel A
Se oye decir a cada momento, cuando hablamos u oímos hablar de política, de economía u otro tema, de que “hay que estar consciente”. Y cuando lo decimos, pareciera que en esa frase se concentrara la esencia de todo el proceso revolucionario
La frase en cuestión, es un tenaz llamado que proviene de todos los puntos de Venezuela y a través de cualquier medio. Lo dicen obreros, empleados, dirigentes políticos o comunales, amas de casa, estudiantes y profesionales.
Nosotros tenemos el deber de oír estas voces que hacen esta convocatoria, porque representan en su unidad a la Conciencia Social Nacional. Y sirva para que cada uno de nosotros haga una profunda reflexión sobre su llamado.
En la propuesta que nos hace la Conciencia Social Nacional, la de ser, estar o hacerse conciente para actuar y corregir, podría hallarse la clave para darle un mayor impulso a la sociedad humanista que está creando la Revolución Bolivariana. Y esto no lo podemos seguir ignorando.
“Estar conciente” es en una consigna que debe tener cierto interés para cada militante de la Revolución Bolivariana.
La cuestión está en que hacemos un llamado a usar la conciencia y de inmediato nos diluimos en nuestro diario batallar, lo olvidamos. Pareciera que hasta nos olvidamos de nosotros mismos, como si durmiéramos en el trajinar de la vida diaria. Y el proceso revolucionario ninguno puede estar dormido. Debemos aprender a mantenernos conscientes. Si actuamos de manera inconsciente crearemos errores.
En cada frente de trabajo que nos tocó vivir, debemos ser impecables. Debemos comprender que ese frente, es una parte de nuestra patria, por lo tanto, debemos actuar con el sentido de pertenencia y responsabilidad que infunde la conciencia.
La Revolución Bolivariana está creando una sociedad humanista. Una sociedad que no pudo crear la sociedad capitalista en cientos de años. Y nuestro deber es no fallar, evitar al máximo los errores. Por todo esto, bien valdría la pena que definamos en cada uno de nosotros, lo que significa estar consciente para ser eficaces.
La Conciencia es uno de los instrumentos revolucionarios más importantes para combatir y erradicar los antivalores del modo de vida y pensar capitalista, que deterioran muchas veces el avance de nuestra revolución. También sirve para crear los auténticos valores humanos, porque muchos de los antivalores se hallan dentro de nosotros mismos, porque vivimos y crecimos bajo su signo.
Nuestra Constitución y en el diario actuar de Chávez, está implícito el llamado a estar conscientes en el pedacito de terreno donde nos desenvolvemos. La Constitución nos invita a ser protagónicos y para eso debemos darnos cuenta de lo que significa estar consciente. Estar consciente en la Revolución Bolivariana conlleva a llevar hasta las últimas consecuencias un sentido profundo de justicia. El sentido de justicia debe guiar nuestros pasos.
Chávez dijo en el Consejo de Ministro número 577 del día martes 29 de abril, que todo el proceso revolucionario que hoy vivimos depende de la conciencia y agregó, que todo lo que hemos alcanzado se perdería sino participamos de manera consciente.
Este tema nos recuerda que una vez se dijo, que la Revolución Bolivariana ya había emprendido una revolución a nivel material, que estaba faltando una revolución de índole espiritual, una revolución de la consciencia.
Sea del ámbito material o espiritual, lo cierto es que estar consciente en la Revolución Bolivariana exige un estado nuevo de consciencia, que supera a la del signo capitalista. Esto nos permite actuar para crear, preocuparnos para mantener y mejorar lo que hemos creado con sentido de justicia por el bien común. Y al hacerlo, nos estamos transformando a nosotros mismos.
José A. Rangel A. (20may08)
Jarach16@hotmail.com
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