Osetia del Sur y Abjasia, Lucha por la independencia y libertad. (I)
Historia de un conflicto post Soviético.
Por: Ricardo Abud
Países como Osetia del Sur y Abjasia (Países del Caucazo) pocos conocidos en nuestro América, inducen a pensar que el mundo globalizado y neoliberal no permite el libre derecho a la autodeterminación, independencia y libertad de pueblos oprimidos durante muchas décadas, la configuración Geopolítica así lo determina.
Historia de un conflicto. Eduard Shevardnadze, considerado como el hombre fuerte de Georgia después de Stalin, probó el sabor de la derrota.
Eduard Shevardnadze Historiador y médico, líder de las Juventudes Comunistas de Georgia y después, paladín de la lucha con la corrupción como titular de Interior y de Seguridad, miembro del omnipotente Politburó del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) y el ministro de Asuntos Exteriores de la URSS más popular en el mundo, fueron algunos de los hitos de su carrera en tiempos soviéticos. Su fama como jefe de la diplomacia soviética ensombreció incluso a la de Andréi Gromiko, el célebre 'Mister Niet' ('Señor No'), que la encabezó desde Iósif Stalin y hasta Mijaíl Gorbachov.
El 15 de enero de 1991 dimitió de su cargo de ministro de Exteriores soviético por voluntad propia y lo anunció en público, junto con las discrepancias que lo impulsaron a hacerlo y la denuncia de un complot conservador para acabar con la 'perestroika'. Cuando el 19 de agosto del mismo año su advertencia se cumplió, él no dudó en sumarse al presidente ruso Borís Yeltsin, aclamado por cientos de miles de personas que defendieron la democracia y que junto con la asonada acabaron con el comunismo en la URSS.
Junto con la URSS desaparecieron sus perspectivas en Moscú y el 7 de marzo de 1992 regresó a Tiflis, aclamado como salvador de la Patria, desgarrada por los clanes armados que derrocaron a Gamsajurdia, para tres días después encabezar el Consejo de Estado y poco después el Ejecutivo.
El 9 de abril de 1991, poco después del colapso de la URSS, Georgia declaró su independencia, con ella comienzan los movimientos por la independencia y libertad de Osetia del Sur, Abjasia y Adjaria (Stalin creó una república autónoma, Abjasia, y dos regiones autónomas, Adjaria y Osetia del Sur, dentro de la República Soviética de Georgia, para evitar la aparición de sólidos nacionalismos locales (destructiva política de desintegración de los pueblos que Stalin llevó a cabo no sólo en Georgia sino en toda la URSS).
Abjasia entra en guerra con Georgia 1992, para ese mismo año celebrar un primer referéndum en Osetia del Sur donde se proclama su soberanía y su independencia de Georgia, los conflictos estallan en ambas regiones.
Las regiones escindidas de Osetia del Sur y Abjasia, no reconocidas por la comunidad internacional, comienzan una lucha que hoy perdura.
Entre tanto Georgia pretende recuperar esas regiones, para ello ha recibido en los últimos doce años, ayuda por mas de 1.200 millones de dólares. Parte considerable de estos medios va destinada a la compra de armas que suministran los países de Europa del Este que han ingresado en la OTAN. Colabora Turquía, y también Ucrania, que tanto aspira a ingresar en la Alianza Atlántica. Los suministros de abundante material bélico viejo soviético a Transcaucasia, pagado con dinero de los EE.UU. con apoyo tácito de la Alianza Atlántica, pueden hacer rebrotar en un futuro próximo los conflictos en área tan inestable.
Georgia ha recibido tanques, vehículos blindados, lanzadores de misiles, aviones de asalto Su-25k, helicópteros de combate (Apache) , lanchas portamisiles y lanchas guardacostas, suministrados por Chequia, Bulgaria, Hungría, Rumanía y Albania. Lituania le ha entregado armas ligeras y municiones sobrantes, a su vez procedentes de Polonia, y con permiso de ésta.
Grandes sumas extrapresupuestarias se están poniendo a disposición del Ministerio de Defensa georgiano por concepto de ayuda que brindan otros países, en primer lugar EE.UU. De otro modo resulta muy difícil explicar de dónde puede extraer considerables sumas un país pequeño y pobre (4,5 millones de habitantes y un PIB de 736 dólares per cápita). Si en 2002 el presupuesto de Defensa georgiano representaba el 1,6% del PIB, en 2005 se aproximó casi al 40%.
El suministro de armas a Georgia por los países del Este con dinero de los EE.UU. resulta beneficioso no sólo para Tbilisi sino también para sus suministradores, que debido a las normas de la OTAN se ven obligados a deshacerse de sus armas viejas.
Osetia del Sur y Abjasia no se doblegan, la lucha continua hasta que se reconozca internacionalmente su autodeterminación, independencia, soberanía y libertad.
chamosaurio@gmail.com
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