Pacientes con cáncer y sus familiares en Bolivia están hoy en emergencia tras reducirse la asistencia por el gobierno de facto y, ante esa situación, anunciaron movilizaciones la próxima semana para exigir atención médica.
Rosario Calle, representante de ese sector en La Paz, declaró que actualmente sólo tres pacientes son atendidos por cada médico y la cifra de los afectados aumentará debido a los recortes de personal en hospitales y clínicas.
Calle confirmó que el equipo de cuidados paliativos no está funcionando y la falta de combustible que afecta la transportación de pacientes inmovilizados en sus casas y el servicio de radioterapia.
Enfatizó que las autoridades del Ministerio de Salud nombradas por el régimen golpista no han respondido esas demandas hasta el momento.
Por otra parte, el expresidente Evo Morales promulgó el pasado 5 de septiembre la Ley del Cáncer para garantizar a los pacientes el acceso universal e integral a la atención en salud, hecho que lo convirtió en el primer gobierno de Bolivia en aprobar una norma para beneficio de ese sector, según fuentes oficiales.
La normativa busca asegurar la prestación de servicios de vigilancia epidemiológica, promoción, prevención, detección temprana, atención, tratamiento y cuidados paliativos a los enfermos, así como programas e infraestructuras para luchar contra esa enfermedad.
Cada año son diagnosticadas aproximadamente 19 mil nuevos casos con diferentes tipos de cáncer y, de esa cifra, 200 son niños, mientras que las enfermedades oncológicas más frecuentes son de mama, cuello uterino y próstata.
Ante esas cifras, el líder aymara impulsó la construcción de tres centros para desarrollar la medicina nuclear, el primero de ellos fue el Instituto de Medicina Nuclear, ubicado en el Distrito Ocho de El Alto (La Paz), previsto a inaugurarse en octubre pasado.
Los otros dos estarían en el sur de la urbe paceña y en el departamento de Santa Cruz (este), a entregarse en diciembre de 2019 y en enero de 2020, respectivamente.
Los centros contarían con modernos componentes en medicina nuclear para el diagnóstico oportuno y seguimiento del cáncer y otras enfermedades, así como el tratamiento mediante el uso de quimioterapia, hormonoterapia y la inmunoterapia.
Asimismo, ofrecerían radioterapia oncológica con equipos de última tecnología como aceleradores lineales, sistemas computarizados de planificación de tratamiento y de inmovilización para dar mayor comodidad a los pacientes.
tgj/nmr
Calle confirmó que el equipo de cuidados paliativos no está funcionando y la falta de combustible que afecta la transportación de pacientes inmovilizados en sus casas y el servicio de radioterapia.
Enfatizó que las autoridades del Ministerio de Salud nombradas por el régimen golpista no han respondido esas demandas hasta el momento.
Por otra parte, el expresidente Evo Morales promulgó el pasado 5 de septiembre la Ley del Cáncer para garantizar a los pacientes el acceso universal e integral a la atención en salud, hecho que lo convirtió en el primer gobierno de Bolivia en aprobar una norma para beneficio de ese sector, según fuentes oficiales.
La normativa busca asegurar la prestación de servicios de vigilancia epidemiológica, promoción, prevención, detección temprana, atención, tratamiento y cuidados paliativos a los enfermos, así como programas e infraestructuras para luchar contra esa enfermedad.
Cada año son diagnosticadas aproximadamente 19 mil nuevos casos con diferentes tipos de cáncer y, de esa cifra, 200 son niños, mientras que las enfermedades oncológicas más frecuentes son de mama, cuello uterino y próstata.
Ante esas cifras, el líder aymara impulsó la construcción de tres centros para desarrollar la medicina nuclear, el primero de ellos fue el Instituto de Medicina Nuclear, ubicado en el Distrito Ocho de El Alto (La Paz), previsto a inaugurarse en octubre pasado.
Los otros dos estarían en el sur de la urbe paceña y en el departamento de Santa Cruz (este), a entregarse en diciembre de 2019 y en enero de 2020, respectivamente.
Los centros contarían con modernos componentes en medicina nuclear para el diagnóstico oportuno y seguimiento del cáncer y otras enfermedades, así como el tratamiento mediante el uso de quimioterapia, hormonoterapia y la inmunoterapia.
Asimismo, ofrecerían radioterapia oncológica con equipos de última tecnología como aceleradores lineales, sistemas computarizados de planificación de tratamiento y de inmovilización para dar mayor comodidad a los pacientes.
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