Los cancilleres de Brasil, Ernesto Araújo; y Argentina, Felipe Solá, mantuvieron una conversación a través de videoconferencia que ambos valoraron positivamente, aunque el representante argentino también subrayó las diferencias que separar a los dos gobiernos.
"El canciller Ernesto Araújo realizó una videoconferencia esta tarde con el canciller argentino Felipe Solá; la conversación tuvo lugar en un clima muy cordial y trató de múltiples temas en las agendas de los dos países", informó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil a través de Twitter.
Solá, por su parte, también recurrió a esta red social para explicar que ambos mantuvieron una "extensa" videoconferencia, aunque además de puntos de encuentro resaltó que también hay diferencias.
"Hablamos de la relación política y comercial sobre la democracia en la región, de puntos de acercamiento en medio de evidentes diferencias y me invitó a Brasilia para fines de enero", escribió.
La relación entre ambos países es tensa desde que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, alertara sobre la posible victoria del ahora presidente Alberto Fernández y mostrara su desagrado cuando venció las elecciones.
Bolsonaro no acudió a la toma de posesión de Fernández en Buenos Aires y no pretendía enviar a ningún representante, aunque a última hora mandó al vicepresidente, Antônio Hamilton Mourão.
En los últimos días, tanto Bolsonaro como Fernández hicieron declaraciones en un tono conciliador resaltado la importancia de que haya una buena relación entre los dos países vecinos.
Sputnik
"El canciller Ernesto Araújo realizó una videoconferencia esta tarde con el canciller argentino Felipe Solá; la conversación tuvo lugar en un clima muy cordial y trató de múltiples temas en las agendas de los dos países", informó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil a través de Twitter.
Solá, por su parte, también recurrió a esta red social para explicar que ambos mantuvieron una "extensa" videoconferencia, aunque además de puntos de encuentro resaltó que también hay diferencias.
"Hablamos de la relación política y comercial sobre la democracia en la región, de puntos de acercamiento en medio de evidentes diferencias y me invitó a Brasilia para fines de enero", escribió.
La relación entre ambos países es tensa desde que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, alertara sobre la posible victoria del ahora presidente Alberto Fernández y mostrara su desagrado cuando venció las elecciones.
Bolsonaro no acudió a la toma de posesión de Fernández en Buenos Aires y no pretendía enviar a ningún representante, aunque a última hora mandó al vicepresidente, Antônio Hamilton Mourão.
En los últimos días, tanto Bolsonaro como Fernández hicieron declaraciones en un tono conciliador resaltado la importancia de que haya una buena relación entre los dos países vecinos.
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