En su Informe quincenal de Protección de Civiles, la OCHA denunció que esas acciones se tradujeron en el desplazamiento de 63 palestinos, que quedaron automáticamente sin vivienda, además de afectar indirectamente a otros 380.
La entidad de la ONU dijo que el incidente más grande ocurrió cerca de Belén, en un área designada como zona de tiro para entrenamiento militar, donde las autoridades de ocupación demolieron 13 estructuras, incluidas casas, refugios de animales, tanques de agua y paneles solares.
En lo que va del año, casi 800 palestinos han sido desplazados en Cisjordania como resultado de las demoliciones, casi el doble de la cifra registrada durante el período equivalente en 2018, señala el informe de la OCHA. En este 2019, agrega el documento, los colonos israelíes perpetraron 12 ataques que causaron heridas a 30 palestinos y daños a unos 48 vehículos.
La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos expresó su preocupación de que, en muchos casos, las fuerzas israelíes presentes durante esos hechos parecían no tomar medidas para prevenir los ataques o proteger a la población.
mem/nvo
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