El bloqueo campesino a la mina Las Bambas persiste hoy pese al anuncio del líder de la protesta de suspenderlo para recibir a una delegación ministerial a tratar las demandas de la zona del conflicto en Perú.
La televisión mostró imágenes de un grupo de campesinos que sigue bloqueando la entrada a la segunda mayor mina de cobre del país, explotada por la transnacional MMG Las Bambas, en la región surandina de Apurímac.
Esa medida se mantiene pese a que el presidente de la comunidad de Fuerabamba, a cargo de la protesta, Gregorio Rojas, anunció anoche la apertura del camino de camino de acceso al yacimiento, bloqueado desde el 4 de febrero.
Explicó que la medida, que impide la salida del mineral por la ruta hasta que se realice la visita del primer ministro, Salvador del Solar, y de los titulares de Inclusión Social, Transportes y Salud, que tratarán sobre acciones de desarrollo para ese territorio.
Según el acuerdo de distensión firmado el sábado último al cabo de un diálogo promovido por la Iglesia católica, los labriegos debían levantar ayer el bloqueo y el Gobierno revocar el estado de emergencia establecido en la zona de conflicto.
Sin embargo, el convenio está pendiente de su aprobación de una asamblea, iniciada hoy, de la comunidad de Fuerabamba en la que participarían otras comunidades con reclamos pendientes a MMG.
En un acuerdo paralelo, la empresa se comprometió a pagar una compensación a la comunidad por el paso, con gran impacto ambiental, de sus camiones cargados de mineral, hacia su planta de procesamiento, principal demanda que motivó la protesta.
MMG se comprometió, además, a cumplir otros compromisos sociales pendientes, como emplear a comuneros en la mina. Un sector de Fuerabamba exige que el presidente Martín Vizcarra trate con el sobre el terreno y que sean liberados dos abogados de la comunidad detenidos bajo acusación de azuzar el conflicto para extorsionar a la mina.
El primer ministro Del Solar aseveró que el acuerdo del sábado último es oficial y debe cumplirse y antes el presidente Vizcarra dijo que los reclamos de los comuneros son justos.
El dirigente Rojas demandó también que el gobierno participe apoyándolos cuando se reúnan con los representantes de MMG para acordar el monto del pago de la compensación pendiente.
mgt/mrs/gdc
La televisión mostró imágenes de un grupo de campesinos que sigue bloqueando la entrada a la segunda mayor mina de cobre del país, explotada por la transnacional MMG Las Bambas, en la región surandina de Apurímac.
Esa medida se mantiene pese a que el presidente de la comunidad de Fuerabamba, a cargo de la protesta, Gregorio Rojas, anunció anoche la apertura del camino de camino de acceso al yacimiento, bloqueado desde el 4 de febrero.
Explicó que la medida, que impide la salida del mineral por la ruta hasta que se realice la visita del primer ministro, Salvador del Solar, y de los titulares de Inclusión Social, Transportes y Salud, que tratarán sobre acciones de desarrollo para ese territorio.
Según el acuerdo de distensión firmado el sábado último al cabo de un diálogo promovido por la Iglesia católica, los labriegos debían levantar ayer el bloqueo y el Gobierno revocar el estado de emergencia establecido en la zona de conflicto.
Sin embargo, el convenio está pendiente de su aprobación de una asamblea, iniciada hoy, de la comunidad de Fuerabamba en la que participarían otras comunidades con reclamos pendientes a MMG.
En un acuerdo paralelo, la empresa se comprometió a pagar una compensación a la comunidad por el paso, con gran impacto ambiental, de sus camiones cargados de mineral, hacia su planta de procesamiento, principal demanda que motivó la protesta.
MMG se comprometió, además, a cumplir otros compromisos sociales pendientes, como emplear a comuneros en la mina. Un sector de Fuerabamba exige que el presidente Martín Vizcarra trate con el sobre el terreno y que sean liberados dos abogados de la comunidad detenidos bajo acusación de azuzar el conflicto para extorsionar a la mina.
El primer ministro Del Solar aseveró que el acuerdo del sábado último es oficial y debe cumplirse y antes el presidente Vizcarra dijo que los reclamos de los comuneros son justos.
El dirigente Rojas demandó también que el gobierno participe apoyándolos cuando se reúnan con los representantes de MMG para acordar el monto del pago de la compensación pendiente.
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