Israel nunca dudaría en intervenir para evitar posibles transferencias de armas "avanzadas" al movimiento libanés Hezbolá. Esto es lo que se desprende de las palabras del primer ministro Benjamín Netanyahu al referirse este viernes a la última incursión aérea de Israel en Siria, según el canal local Arutz Sheva.
Netanyahu ha justificado la incursión explicando que los aviones de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) estában allí para atacar un convoy de armas de Hezbolá. El jefe del Ejecutivo israelí ha enfatizado que su país continuará reaccionando del mismo modo a los intentos de transferencia de armas a este grupo libanés que es apoyado por Irán, aliado del Gobierno sirio y enemigo para Tel Aviv. "Así es como hemos actuado y cómo vamos a seguir actuando",ha advertido Netanyahu. El primer ministro ha añadido: "Todos deben tener esto en cuenta".
Damasco afirma derribar un avión israelí y Tel Aviv lo niega
Este viernes, el Ejército sirio anunció que había derribado uno y dañado otro de los cuatro aviones de la Fuerza Aérea israelí que penetraron en el espacio aéreo de la república árabe, concretamente en los Altos del Golán. Damasco afirma que el objetivo de la Fuerza Aérea de Israel eran intereses militares sirios en el área de Palmira. Las autoridads sirias calificaron de "una violación flagrante" al derecho internacional el sobrevuelo de cuatro cazas israelíes en su territorio.
Por su parte, el Ejército israelí confirmó haber llevado a cabo ataques aéreos contra varios objetivos en Siria. Sin embargo, las Fuerzas de Defensa aseguraron que ninguno de sus aviones resultó dañado. Asimismo, las autoridades israelíes afirmaron que los bombardeos estaban dirigiéndose a posiciones de Hezbolá en el interior de Siria.
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