La exmandataria Cristina Fernández llamó a la unidad de los sindicatos y los dirigentes políticos para crear un nuevo frente que convoque a las mayorías.
"El sindicalismo debe unirse con lo político para lograr la unidad de nuevas mayorías e instalar en Argentina nuevamente un proyecto fundador y equitativo en la distribución de ingresos", enfatizó este miércoles Cristina Fernández, expresidenta de Argentina durante un acto en la sede gremial de ATE Capital.
La expresidenta convocó a la construcción de un gran frente e instó al pueblo argentino a no enojarse con los que votaron en contra, "tenemos que enojarnos con nosotros mismos porque no supimos convencer".
La expresidenta argentina puntualizó que se necesitan "abordar reformas institucionales que consagren derechos que no puedan ser removidos".
"La reforma de la Justicia en Argentina es un tema pendiente, debemos lograr que queden consagrados principios en la Constitución como el nivel de endeudamiento que puede tener un país sino vamos a tener una eterna calecita de endeudamiento, desendeudamiento".
Fernández hizo énfasis en rescatar la "verdadera función" de los dirigentes que ocupan puestos en el Parlamento, en un municipio o en un sindicato, "ellos deben representar a aquellos que los eligieron. Nadie está sentada por derecho divino. Están sentados por el voto popular".
Fernández expresó una profunda angustia "al ver las manos de muchos compatriotas alzadas por una bolsa de verduras", con respecto al "verdurazo" llevado a cabo este miércoles en Argentina, como parte de una protesta de los pequeños productores.
"Realmente me sentí impotente e inútil porque me pregunté qué pasó que volvimos a tener imágenes de un pasado que creíamos sepultado", recordó la exmandataria.
Hizo referencia a la "brecha" que se hizo visible con el "verdurazo", mediante el cual se percibió la división que existe entre "unos argentinos que no pueden comer y otros que pueden hacer lo que se les cante".
La "pesada herencia" que recibió Macri el pasado diciembre
La Argentina es un país con una desocupación del 6 por ciento, con la menor desigualdad social en toda la región y la mayor clase media, con instituciones sólidas y una infraestructura bien desarrollada, así lo expuso Mauricio Macri en un documento que elaboró para venderle el país a los inversionistas de EE.UU.
Sin embargo, al presentar un diagnóstico de la denominada "herencia kirchnerista" y de la situación de la administración pública, Mauricio Macri señaló que el Estado "arrastraba problemas para proveer bienes públicos a la ciudadanía".
En este sentido, la exmandataria argentina cuestionó el discurso de la "pesada herencia" y mencionó el folleto que se entregó a los empresarios presentes en el foro organizado por el Gobierno en el Centro Cultural Kirchner.
"La pesada herencia: ¿en qué consistía?. Desendeudamiento, prácticamente pleno empleo", insistió y completó: "Dejamos una herencia pesada, dejamos sindicatos fuertes y paritarias funcionando".
En contexto
En los últimos meses distintos gremios se han movilizado en protesta por las distintas medidas de ajuste económico aplicadas a los trabajadores en Argentina.
La herencia no era tan pesada, documento para inversores deja al descubierto la mentira macrista. #MiniDavos pic.twitter.com/EQa6A0eSrv— CasaRosada 2003-2015 (@CasaRosadaAR) 14 de septiembre de 2016
Cuando Macri diga q recibió #PesadaHerencia y por eso toma medidas contra vos, leé lo q dijo en el Foro #Minidavos pic.twitter.com/Af9nKH23ja— oleajeperpetuo (@oleajeperpetuo) 14 de septiembre de 2016
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