El abogado defensor de la mandataria señaló que el desvío de poder que inició en la Cámara ahora continúa en el Senado.
El abogado de la presidenta Dilma Rousseff, José Eduardo Cardozo, manifestó que ejercerá una "defensa maniatada" durante el desarrollo del impeachment que una Comisión Procesal del Senado Federal de Brasil desarrolla contra la mandataria constitucional.
Estas palabras de Cardozo fueron expresadas en protesta por lo que él mismo calificó de "absoluta incoherencia regimental", luego de abandonar la reunión del Senado junto a los senadores de Partido de los Trabajadores (PT) y del Partido Comunista de Brasil (PCdoB).
Minutos antes de que los legisladores y el abogado se marcharan, el presidente de la Comisión Procesal, Raimundo Lira, determinó votar por bloques, y no de modo individual como se solicitaba, los requerimientos de la defensa y la acusación aceptados o denegados por el relator Antonio Anastasia.
Entre los requerimientos de la defensa rechazados por Anastasia está la petición de anexar al expediente del caso las grabaciones hechas por un exdirectivo de Petrobras, en las que el senador Romero Jucá afirma que era necesario detener la operación anticorrupción Lava Jato. Al respecto, Cardozo expresó que existe un profundo desvío de poder en torno a este proceso que inició en la Cámara y ahora continúa en el Senado.
"Forma sin sustancia no tiene significado", agregó para expresar que darle la palabra en las reuniones solo busca cubrir las apariencias y que realmente no se le está permitiendo ejercer sus funciones, porque todo lo que buscan es apresurar el juicio para finalmente destituir a la mandataria electa constitucionalmente por el pueblo, Dilma Rousseff.
"Defender sin tener la posibilidad de mostrar pruebas que evidencian la nulidad del proceso es una defensa maniatada y pisoteada", remarcó.
En contexto
La comisión del Senado encargado del impeachment se reunió este jueves para aprobar el cronograma de trabajo de esta segunda etapa del proceso que busca la destitución de Rousseff, pero no pudo realizarse la votación porque se planteó una cuestión de orden que encamina a reducir el plazo para alegaciones finales de la defensa y la acusación de 15 a 5 días.
Debido a la controversia generada por esta moción, Lira resolvió que la palabra final sobre la modificación del lapso de exposición de los alegatos presentada por Anastasia sea definida por el presidente de la Suprema Corte, Ricardo Lewandowski. "Solo después que este se pronuncie se someterá a votación el cronograma de trabajo", indicó.
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