Washington, 24 abr (PL) Las elecciones primarias de hoy en cinco estados de Estados Unidos parecen ser ajenas a la expectación generadas por sus predecesoras, ante el evidente favoritismo del aspirante republicano Mitt Romney.
Después del abandono de la puja de su más enconado rival Rick Santorum, aparece un camino casi sin escollos para el exgobernador de Massachussets y solo es cuestión de tiempo que logre acumular los delegados necesarios para agenciarse la candidatura por el llamado partido rojo.
Con sus 683 delegados, las encuestas otorgan al candidato de confesión mormona triunfos bastante holgados este martes en Connecticut, Delaware, New York, Pennsilvania y Rhode Island.
Antes de la salida de Santorum, existían especulaciones sobre la posibilidad de una dura porfía en el estado natal del exgobernador, Pennsilvania, pues en el resto de los territorios se daba por descontada su victoria.
No obstante, aunque obtuviera los alrededor de 231 delegados que se pondrán en disputa, todavía serían insuficientes para alcanzar la cota establecida.
Se requieren mil 144 delegados para obtener el aval del Partido Republicano y resultar el candidato oficial por a las elecciones de noviembre.
De conseguirlos antes de las últimas primarias, en Utah el 26 de junio, habría que esperar a la Convención Nacional Republicana, del 27 al 30 de agosto en Tampa, Florida, para conocer al rival del presidente Barack Obama, aunque Romney iría igualmente con casi todas las de ganar.
El exgobernador llega a estas consultas parciales en una situación inmejorable, cuando cada vez más figuras importantes del partido rojo están respaldando su candidatura.
Entre ellos se encuentran el exgobernador de Florida Jeb Bush, considerado por muchos como uno de los "pesos pesados" de los conservadores, al igual que el expresidente George H. W. Bush, el senador por Florida Marco Rubio y el Tea Party, núcleo ultraconservador del bando republicano.
De igual forma, en las últimas semanas incrementó su popularidad en los sondeos, algunos de los cuales lo muestran empatado con el gobernante.
Romney tiene ante sí, sin embargo, una tarea urgente: aprender las lecciones de una contienda llena de torpezas que le costaron tiempo, dinero y reforzaron las dudas sobre su candidatura.
Ello es una necesidad absoluta dada la maquinaria electoral del mandatario, bien aceitada y de probada eficiencia en materia de elecciones, comentó recientemente el diario Detroit Free Press.
En varias ocasiones, el mormón aseveró estar poco interesado por los sectores menos favorecidos, lo que unido a su fuerte retórica antiemigrante es utilizado por sus adversarios para presentarlo como un millonario aliado a las élites con posiciones extremistas.
Después de la fecha, el calendario de las primarias continuará con una próxima parada el 8 de mayo en Indiana, North Carolina y West Virginia.
mgt/lr
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