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La sonda rusa Fobos-Grunt, que fue lanzada para estudiar una luna de Marte, no pudo tomar la trayectoria debido a una falla en un propulsor y quedó en órbita terrestre. La Agencia espacial Roskosmos asegura que la situación puede ser superada durante este miércoles.
Vladimir Popovkin, director de la institución, informó de la falla que evitó que la sonda se orientara hacia las estrellas del sistema solar.
El aparato, de 13,5 toneladas de masa, fue lanzado a las 20H16 GMT del martes por un cohete Zenit-2SB desde el cosmódromo kazajo de Baikonur. Pero, “el motor no se puso en marcha” (...) No hubo ni primer ni segundo encendido”, explicó Popovkin.
La idea inicial era que luego de la separación del lanzador y de quedar en órbita alrededor de la Tierra, la sonda debía usar el campo gravitatorio para tomar la dirección de Marte hacia la 01H00 GMT del miércoles.
Pese a la situación, Popovkin indicó que los especialistas de tierra conocen los parámetros de la órbita de la sonda automática y establecieron contacto con ella, por lo que aseguró que la misión no “es un fracaso”.
"No diré que (el lanzamiento) ha sido un fracaso. Es una situación imprevista, en la que hay que trabajar", dijo el director de Roscosmos.
Agregó que los especialistas tienen 72 horas para cargar un nuevo programa de vuelo en el ordenador central de la Fobos-Grunt.
"Tenemos un plazo de tres días, mientras funcionen los acumuladores", dijo Popovkin.
Agregó que el aparato conserva todo su combustible, lo que permite volver a programar el vuelo que tiene como objetivo principal determinar si Fobos, una de las dos lunas marcianas, es un asteroide que quedó bloqueado en la órbita de Marte o si ese pequeño cuerpo celeste -18 km de diámetro- se desprendió del planeta rojo.
De llegar a su destino en los próximos 11 meses, la sonda debe recoger muestras del suelo de Fobos y traerlas en su regreso a la Tierra, previsto para 2014.
Este experimento permitirá el estudio de la materia inicial del sistema solar y ayudará a explicar el origen de Fobos y Deimos, la segunda luna marciana, así como de los demás satélites naturales en el sistema solar.
Para Rusia este lanzamiento es de máxima importancia, pues se trata de su primera misión interplanetaria después del fracaso de Marte 96, lanzado en noviembre de 1996.
La última misión interplanetaria exitosa de Moscú data de 1986, con el lanzamiento de las sondas soviéticas Vega para explorar Venus y el cometa Halley.
Previsto para 2009, el lanzamiento de Fobos-Grunt había sido postergado hasta 2011. Cada dos años, la distancia entre Marte y la Tierra se reduce, lo que facilita los lanzamientos.
teleSUR-Afp -Efe/ PR
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