3,1 millones de niños vivirán en pobreza extrema en Reino Unido para 2020
TeleSUR
Un total de 2,8 millones de niños viven en la absoluta pobreza en Reino Unido y se espera que para el 2020 la cifra aumente a 3,1 millones (23,1 por ciento) debido a la política fiscal y recortes de subsidios del actual Gobierno británico, señala un estudio publicado por un instituto de investigación financiera.
De acuerdo con el análisis del Instituto de Estudios Fiscales (IFS, sigla en inglés), los ingresos medios de la población bajarán un 7 por ciento hacia finales de esta década, lo que empujará a más niños hacia la pobreza absoluta.
Según el instituto, la pobreza "absoluta" se da cuando una familia recibe menos del 60 por ciento de un ingreso promedio, y debido a los recortes de los subsidios hechos por el Gobierno de David Cameron por la crisis económica y al aumento de los impuestos, como el IVA (que ha pasado del 17,5 al 20 por ciento), las personas está sufriendo seriamente las consecuencias.
Actualmente 2,8 millones de niños, un 21,1 por ciento, están en el estatus en la actualidad y de acuerdo con el IFS, 3,1 millones de niños, un 23,1 por ciento, vivirán en la pobreza absoluta en 2020.
Para el IFS, la actual administración británica no cumplirá con los objetivos de reducir la pobreza, contenidos en la llamada Ley de Pobreza Infantil, aprobada por el anterior Gobierno laborista con el apoyo de todos los partidos en 2010 y que establecía que no más del 5 por ciento de los menores debía vivir en la pobreza absoluta hacia finales de la presente década.
Desde octubre 2010, el gobierno de Reino Unido ha aplicado una serie de recortes presupuestarios para enfrentar la crisis económica que vive Europa.
La medidas buscan reducir el déficit fiscal de la nación que se ubica en 11 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Los anuncios contemplan la eliminación de 490 mil empleos en el sector público, incremento de las cotizaciones públicas de jubilación y el aumento de la edad de retiro a 66 años, lo que significa cuatro años más de lo estipulado en la actualidad.
Este plan de ajustes pretende ahorrarle a la nación unos 95 mil millones de euros (más de 131 mil millones de dólares) en unos cuatro años.
teleSUR-Efe / PR
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Un total de 2,8 millones de niños viven en la absoluta pobreza en Reino Unido y se espera que para el 2020 la cifra aumente a 3,1 millones (23,1 por ciento) debido a la política fiscal y recortes de subsidios del actual Gobierno británico, señala un estudio publicado por un instituto de investigación financiera.
De acuerdo con el análisis del Instituto de Estudios Fiscales (IFS, sigla en inglés), los ingresos medios de la población bajarán un 7 por ciento hacia finales de esta década, lo que empujará a más niños hacia la pobreza absoluta.
Según el instituto, la pobreza "absoluta" se da cuando una familia recibe menos del 60 por ciento de un ingreso promedio, y debido a los recortes de los subsidios hechos por el Gobierno de David Cameron por la crisis económica y al aumento de los impuestos, como el IVA (que ha pasado del 17,5 al 20 por ciento), las personas está sufriendo seriamente las consecuencias.
Actualmente 2,8 millones de niños, un 21,1 por ciento, están en el estatus en la actualidad y de acuerdo con el IFS, 3,1 millones de niños, un 23,1 por ciento, vivirán en la pobreza absoluta en 2020.
Para el IFS, la actual administración británica no cumplirá con los objetivos de reducir la pobreza, contenidos en la llamada Ley de Pobreza Infantil, aprobada por el anterior Gobierno laborista con el apoyo de todos los partidos en 2010 y que establecía que no más del 5 por ciento de los menores debía vivir en la pobreza absoluta hacia finales de la presente década.
Desde octubre 2010, el gobierno de Reino Unido ha aplicado una serie de recortes presupuestarios para enfrentar la crisis económica que vive Europa.
La medidas buscan reducir el déficit fiscal de la nación que se ubica en 11 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Los anuncios contemplan la eliminación de 490 mil empleos en el sector público, incremento de las cotizaciones públicas de jubilación y el aumento de la edad de retiro a 66 años, lo que significa cuatro años más de lo estipulado en la actualidad.
Este plan de ajustes pretende ahorrarle a la nación unos 95 mil millones de euros (más de 131 mil millones de dólares) en unos cuatro años.
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