Llegó el día más esperado durante años
Luis Melián, Enviado Especial
Beijing, 8 ago (PL) EL día más esperado durante años llegó: Hoy se inauguran los XXIX Juegos Olímpicos. Beijing y toda China están de fiesta y con ellas buena parte del mundo.
Y a las ocho y ocho minutos de la noche la alegría será mayor. La ceremonia de apertura se hará realidad como punto culminante de preparativos de casi dos décadas.
Unas 160 mil personas estarán en la inauguración, la cual incluye un espectáculo cultural dirigido por el famoso director de cine Zhang Yimou y que acercará al público y televidentes de todas partes a la rica y milenaria historia y cultura chinas.
De todo ello también serán testigos más de 80 estadistas invitados para la ocasión.
China ve premiado así esfuerzos iniciados en la década pasada cuando se postuló para organizar la cita estival del 2000, finalmente concedida a Australia en reñida votación: Beijing, 43, Sydney, 45.
El resto de la historia es conocido. En el 2001 la capital china ganó ese derecho y desde entonces todo se aceleró. Los anfitriones se comprometieron a realizar unos juegos verdes, de alta tecnología y del pueblo, que ya están en marcha.
Más de 11 mil deportistas inscritos, cifra récord de comités olímpicos nacionales representados, los torneos de fútbol en acción, las demás subsedes listas. Todo y todos sólo están a la espera de la señal que oficialice la arrancada de esta fiesta del músculo.
Como es lógico, esta empresa deviene reto enorme para cualquier nación, pero en el caso de China se hizo mayor por las campañas en su contra.
Unas promueven el separatismo del Tíbet y Taiwán, otras centradas en supuestas violaciones de los derechos humanos y de la libertad de expresión, a tal extremo que hasta un símbolo como la antorcha olímpica también fue blanco de acciones que nada tienen que ver con el deporte.
A las preocupaciones medioambientales los organizadores respondieron con medidas concretas: reducción del tráfico vehicular, cierre de plantas industriales, campañas educativas con la población, entre otras.
Nada que decir de las instalaciones, incluida la Villa Olímpica, las cuales reciben solo elogios tanto de atletas como de federativos y visitantes. Todas, de una forma u otra, cumplen el compromiso de juegos verdes, de alta tecnología y del pueblo.
El Estadio Nacional, o Nido de Pájaro, sede de la ceremonia inaugural, y su gran vecino, El Cubo Acuático, plaza de la natación, constituyen ejemplos concretos de ese empeño y ya son muy populares entre los lugareños y turistas.
Beijing disfruta hoy un día feriado como para prepararse para el ajetreo que vivirá hasta el próximo día 24 durante esta gran fiesta a la que también aportan las subsedes de Shanghai, Tianjin, Shenyang y Qinhuangdao (fútbol), Qingdao (velas) y Hong Kong (justa ecuestre).
Sólo falta que la Madre Natura se sume a este júbilo.
ln/lam PL-4
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