Mi misiva al niño Jesús.
Debo empezar como todos lo hacen.
Querido Niño Jesús, te escribo con mucha humildad para expresarte con esta misiva, no, una requisición material, solo te escribo por que quiero hablar mas cerca contigo.
Son tantas cosas que quiero conversar contigo (perdóname que te tutee) que las palabras no fluyen con la espontaneidad del caso, es difícil sentarse a escribirte y hablar contigo, creo es mas fácil sentarse y pedirte como todos lo hacen.
Tu mi estimado Jesús sabes que durante muchos años, fui miembro del clan de niños (as), que te enviábamos misivas en Navidad para solicitarte tus buenos oficios en la entrega de una bicicleta, una pelota o algún otro juguete que saciara nuestras exigencias, debíamos esperar mas de 11 meses para ser provistos de esos regalos, hoy me pregunto ¿Por qué recibirlos después de tu nacimiento, por que esperar tanto tiempo?
Una de mis quejas o más bien una critica, es por que a un niño que de acuerdo a la razón de quien lo juzga no puede recibir un regalo en navidad, so pretexto de haberse portado mal, tú no has enseñado a través de la palabra que la candidez de un niño no permite la maldad, si eso es cierto, ¿por que se juzga a los niños (as)? y bajo la presión del chantaje los someten a los designios de un adulto y en tu nombre se le confiesa, el niño Jesús no te va a traer nada este año. ¿Quien les da el derecho de hablar a esas personas en tu nombre? ¿Por qué insultar y maltratar la candidez de un niño? ¿Por qué predisponer a ese niño ante tu omnipresencia? No entiendo querido niño Jesús. Parece que los adultos somos los que nos portamos muy mal y jugamos con la inocencia de nuestros niños y niñas.
Consternado hoy acudo ante ti mí querido niño Jesús, no con un pedido de algún juguete, el tiempo se fue para mí (te confieso, que me gustaría un juguete en estas navidades), hoy recurro a ti en busca de algunas explicaciones que atormentan mis pensamientos y que en algún momento infieren de manera negativa cuando a ti te imploro.
Mi vida no ha sido lo que muchos han querido y pretendido de mí, han querido moldearme a ellos, eso es comprensible, pero tú me enseñaste ser Ricardo, no debo ser lo que otros quieren que sea yo. Pero te confieso que aquellos que reclaman en mi un cambio, no desean cambiar bajo la perspectiva en que yo quiero verlos, es algo confuso mi querido Jesús, pero la naturaleza de confusiones que tu nos brindaste nos hace exigentes con los demás, mas no con nosotros mismos.
Sabes me gustaría conocerte en persona, se que cuando tu lo decidas eso pasara, entre otras cosas la mas importante que te debo preguntar, es acerca de la naturaleza del dolor, el sufrimiento, te considero experto en la materia, se por las enseñanzas bíblicas de tu dolor e incluso le he vivido a través de las películas que exaltan tu vida, películas que han generado mucho dinero a sus realizadores. ¿Exaltar el sufrimiento es un negocio? No lo creo, pero en todo caso fue extraordinario entender tu sacrifico y tu dolor por tu prójimo.
La vida mi señor Jesús que nos legaste se ha distorsionado mucho, hay personas que solo se han dedicado a vivir del dolor ajeno, y todo acontece ante la mirada indolente de aquellos que pretenden inculcarnos tu amor, tus vivencias, tu humildad, tu solidaridad. Extraño no…
Niño Jesús, veo con preocupación como están desbastando el planeta que tu elegiste para nosotros, muchas de esas personas que están contribuyendo con su destrucción antes de salir de su casa, te regalan oraciones y te invocan, buscando tu gracia ante la maldad y el flagelo que están cometiendo, ¿Tu los escuchas en sus oraciones?
Observo con espanto que muchos de tus más fervientes seguidores utilizan vocablos que no se acercan a ese amor que tú derramaste en nosotros, aman y promueven la cultura de la muerte, sin el más mínimo apego de decencia por la vida. ¿Verdad que no tienen razón?
Ayer en medio de mi solead experimentaba una sensación de vació muy grande, de hecho me hizo pensar que ya no manejaba mi soledad con la reverencia y confianza con que la había asumido, me asuste, solo atine a buscarte en mis pensamientos y apareciste fugazmente, no a recriminarme, me diste mas luz en una oscuridad que no termino de entender, pero gracias a ti no me sentí solo. En ocasiones como tu sabes he renegado de tu benevolencia, me has quitado físicamente a seres que he amado y con los cuales me hubiese gustado compartir toda la vida, no se que significa toda la vida, eso solo lo sabes tu, ¿cuanto dura nuestra vida?, pero no lo deja de ser absurdo, el egoísmo con que a veces nos enseñas a verte como lo que eres, ese ser supremo, que a veces me pareces un poquito inquisidor o dictador, pues, decides el momento de cada quien sin importante el dolor que esa perdida pueda generarnos.
A veces cuando me ha pasado, no dejo de preguntarme, por que solo nos has preparado para vivir y nunca nos has enseñado a aceptar la muerte con la alegría con que tú recibes a los que te llevas, me parece muy injusto de tu parte, siento que la desventaja es muy grande.
Hoy mi querido Jesús la relación política que vivimos en el mundo crea un desequilibrio que causa mucha insatisfacción, un país muy grande y muy avanzado tecnológicamente insiste en perturbar a los pequeños, que quieren decidir su futuro en armonía con sus habitantes, yo como parte de un país pequeño, siento las agresiones y reclamo ante ti, la justicia que me pertenece, soy libre y no puedo permitir que ellos me dominen y cercenen mis derechos mas elementales como lo es mi derecho a la autodeterminación política, a mi libertad espiritual, a mis derecho de vivir en un país mas justo como el que hoy construimos.
Como debes estar ya informado en nuestro país, Venezuela, estamos procurando seguir tu ejemplo, tu lucha por los desposeídos, por los olvidados, por los marginados, por aquellos que solo han tenido deberes mas no derechos, no es fácil construir o transitar ese camino mi querido niño Jesús, fíjate que hemos encontrado resistencia incluso de aquellos que al calor de San Pedro construyeron el mensaje divino, tus fieles, los miembros de la realeza episcopal no desean el bien común y se anteponen de manera rotunda a todo que marque la pauta para erradicar la exclusión en este pequeño rincón del mundo, violan los mandamientos de tu la ley divina, no creas que es un chisme, simplemente te pongo al tanto de lo que acontece aquí abajo, es probable que motivado a tus ocupaciones no lo hayas notado, confírmalo y después toma los correctivos, solo es una sugerencia, no me malinterpretes OK.
Difícil manejar la posibilidad cierta de que los cantos de la maldad puedan vencer el sueño de las mayorías ante tu mirada indiferente, se que eres el dios de todos, todos recurren ante ti con oraciones, no se de que lado te encuentras en este momento, pero consciente de que tenemos la razón (somos mayorías) debes orientar mas nuestras luchas en procura del bienestar común, ese por el cual tanto luchaste y te bañaste en dolor. Justo de mi parte sumar mi voz en procura de alcanzar la magnificencia de la revolución bolivariana. Se que nos protegerá la razón nos asiste. La maldad será derrotada incluso bajo el disfraz de aquellos que predican en tu nombre.
Querido niño Jesús a escasos días de celebrar la Navidad, o un año mas de tu nacimiento, he pretendido con esta misiva, informarte de algunas consideraciones que no me permiten asumir la vida con la disposición con que tu quieres lo haga, las inconformidades expuestas no son mas que una manera de hablar a través del verbo escrito contigo y decirte que no entiendo por que existe o permites tanta oposición en el camino hacia el bien. No pretendo que respondas de la misma manera en que me comunico contigo (verbo escrito), solo reclamo ante ti, la sabiduría del líder y que le des mucha luz para nos ayude a depurar la revolución y la construcción del mundo por el cual fue tu sangre derramada. Bienvenido un nuevo año de tu aniversario querido niño Jesús.
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