Los cinco ¿aberración jurídica o juego político?
Entrevista a Gloria La Riva
(Tercera parte)
Por Orestes Martí y Michel Balivo
Ilustración Juan Kalvellido
En el mensaje que los Cinco antiterroristas cubanos enviaron al pueblo de los Estados Unidos el 17 de junio de 2001, entre otras cosas expusieron:
"Cinco cubanos leales a su pueblo, que durante 33 meses y 5 días hemos soportado el riguroso encierro en las celdas de una prisión de otro país cuyas autoridades son hostiles al nuestro, y donde hemos sido juzgados después de un largo y escandaloso proceso mediante procedimientos, métodos y objetivos de carácter absolutamente políticos y bajo un verdadero diluvio de propaganda malintencionada y fraudulenta, hemos decidido dirigirnos directamente al pueblo norteamericano para hacerle conocer que hemos sido víctimas de una colosal injusticia.
Se nos acusó de poner en peligro la seguridad de Estados Unidos, imputándonos numerosos cargos, e incluso delitos como la conspiración para asesinar los que, por su incuestionable falsedad, no fueron ni podrán ser probados, y por los cuales podemos ser sancionados a decenas de años de prisión y a cadenas perpetuas.
Un jurado constituido en Miami y esto lo explica por sí mismo, nos declaró culpables de todos los cargos que se nos imputaban".......
D Gloria La Riva, en la continuación de nuestra entrevista a distancia, interrumpida frecuentemente por sus múltiples actividades y acciones en pro de la justicia social en su país, responde a nuestras preguntas y brinda sus vivencias y puntos de vista.
P: ¿Cómo puede haber influido el aparente contubernio de las autoridades de la Florida con los grupos de la extrema derecha cubano americana y el juicio con motivaciones políticas llevado acabo contra los Cinco Cubanos actualmente presos en las cárceles norteamericanas?
Para entender la persecución de los Cinco en el juicio, hay que ver todo el panorama desde antes de el arresto hasta el comienzo del juicio (27 meses), y durante el tribunal (7 meses). Todos tomaron parte en la campaña contra los Cinco Héroes: el FBI, la fiscalía, la jueza, oficiales y ex-oficiales, los congresistas cubanos ultraderechistas Ros-Lehtinen y los Díaz-Balart, los terroristas y la prensa.
Fueron tantas las violaciones fuera y dentro de la corte, que realmente es imposible por el espacio que se necesita, difundir todas las irregularidades, pero tocaré algunos puntos.
Fundamentalmente, la injusticia se basa en que el juicio se llevara a cabo en Miami, aunque también hay que dejar claro que los Cinco nunca deberían haber sido arrestados. Su misión era de salvar vidas y eso no es crimen.
EL FBI, HÉCTOR PESQUERA Y LOS TERRORISTAS
Sí el terrorismo es una parte de la política anti-Cuba de Washington (las 3,478 muertes de cubanos, víctimas del terrorismo, son la prueba) entonces no es difícil entender que las autoridades federales—junto con las instituciones y la extrema derecha de Miami—se dedicaran a cazar y perseguir a los hombres que luchaban contra ese terrorismo.
La maquinaria del FBI buscaba a los agentes cubanos que con tanto éxito paraban los ataques terroristas contra Cuba, mientras que dejó —y sigue dejando—a los múltiples grupos terroristas operar con impunidad en el sur de la Florida.
Y los vínculos entre el FBI y los terroristas con oficio legislativo son estrechos: Entre las primeras personas que el mismo director del FBI Louis Freeh llamó después del arresto de los Cinco, fueron los congresistas cubano-americanos, Ileana Ros-Lehtinen y Lincoln Díaz-Balart. ¿Cuál era el propósito de esas llamadas, sino de mantener al tanto a estos políticos de la ultra-derecha, que son además, cómplices con los terroristas?
Ros-Lehtinen tiene un largo historial de apoyo directo a los terroristas. Ella fue quien ayudó en conseguir las avionetas para Hermanos al Rescate. Ella fue quien abogó para que Orlando Bosch se quedara libre en los Estados Unidos en 1989 cuando el Departamento de Justicia preparaba su deportación. (Bush padre, el presidente entonces, y el jefe de la CIA cuando Bosch y Posada orquestaron la voladura del avión cubano, intervino y dio permiso a Bosch para quedarse en EEUU.) El apoyo a Bosch fue uno de los principales temas de su campaña como candidata para el Congreso. ¡Y fue elegida! ¿El jefe de su campaña? Fue Jeb Bush, gobernador actual de la Florida.
Héctor Pesquera, jefe del FBI en Miami, quien dirigió el arresto de los Cinco, tiene una trayectoria muy sospechosa en cuanto al terrorismo de Miami. Realmente se necesitan más investigaciones sobre su estrecha relación con la red de terroristas anti-cubana. Una fuente informativa son los artículos de Jean-Guy Allard del periódico Granma de Cuba.
Pesquera fue asignado para dirigir la oficina del FBI en Miami en septiembre 1998, días antes del arresto de los Cinco el 12 de septiembre, y se retiró del FBI en 2003, para trabajar con el Departamento de "Homeland Security" en la Florida. Era conveniente entonces para Posada Carriles llegar a los Estados Unidos en marzo 2005 por el puerto de Miami, en el barco Santrina, con, entre otros, los terroristas Santiago Álvarez y Osvaldo Mitat.
La relación de Pesquera con los terroristas va más allá de la frontera del país. Según El Nuevo Herald del 10 de noviembre 2005, en la investigación por Venezuela del asesinato por coche bomba del Fiscal General de Venezuela, Danilo Anderson el 18 de noviembre 2004, un colombiano dio testimonio de que Pesquera estaba presente en una reunión en Panamá, donde los terroristas planeaban el asesinato de Anderson y otros líderes venezolanos. Esa reunión tomó lugar entre el 4 y el 6 de septiembre del año 2003. Pesquera todavía era jefe del buró del FBI en Miami.
Es increíble, mirando hacia atrás, y reflexionando sobre esos primeros días del juicio en noviembre del 2000, que mientras los Cinco estaban en la corte con un montón de cargos por su misión anti-terrorista, que en Panamá cuatro terroristas de los más peligrosos que hay, tres de ellos residentes de Miami, Gaspar Jiménez Escobedo, Pedro Remón, y Guillermo Novo Sampol, todos asesinos, estaban planeando con su líder Luis Posada Carriles, el asesinato de Fidel Castro y cientos de personas más, si hubieran tenido éxito.
Y ahora esos terroristas han regresado libres a Miami, mientras los Cinco están encarcelados.
LA FISCALÍA FEDERAL DE MIAMI
La oficina del fiscal federal (U.S. Attorney's office), del distrito de la Florida procesó el caso de los Cinco con un vigor sin precedente, y lo sigue haciendo hasta el presente.
John Kastrenakes, uno de los fiscales que argumentó para el gobierno en el juicio—junto con Caroline Heck Miller, (ella fue quien presentó los argumentos orales para la fiscalía en la última vista oral el 20 de agosto 2007)—sus declaraciones fueron tan ilegales y violadoras del derecho, que aumentaron a casi 35 incidentes de mala conducta por la fiscalía. De esas violaciones, 28 fueron sostenidas por la corte, y forman parte clave de los alegatos de la apelación actual por la defensa. La posición de la defensa de los Cinco es que la mala conducta de la fiscalía contribuyó grandemente a la condena injusta de los Cinco.
Si el panel de tres jueces en Atlanta en esta instancia apelatoria decide que sí hubo mala conducta por parte de la fiscalía, entonces al analizar las dos condenas principales, una por conspiración a cometer asesinato y la otra, conspiración para cometer espionaje, esos cargos tendrían que pasar por un estándar judicial más riguroso, el estándar de "prueba abrumadora o fuerte".
Y como dijo Richard Klugh, abogado de apelación para Fernando González, en la última vista oral el 20 de agosto de este año en Atlanta, el gobierno nunca probó que las evidencias eran abrumadoras ni fuertes, en los dos cargos de conspiración.
Regresando al juicio, a Kastrenakes y a los otros fiscales, no les importaba que violaban las reglas judiciales. Para ellos lo importante era lograr conseguir la condena de los Cinco, y hacerles luchar por años en apelaciones, y esperar que ganara el gobierno por medio de una corte de apelaciones muy conservador, como es el Onceno Circuito de Apelaciones para el sureste del país.
LA PRENSA: HERRAMIENTA DE LA ULTRADERECHA Y LA FISCALÍA
Los medios de comunicación de Miami jugaron un papel clave en condenar a los Cinco fuera y dentro de la corte, por el clima de histeria que incendiaron, y los mitos que emitieron a través de la radio, la tele, y el diario.
Cuando se trata de Cuba, la cobertura en la prensa miamense varía entre amenazante, ultrajante y ridícula. En el caso de los Cinco, la cobertura trataba de imponer una atmósfera de inseguridad en la población por la presencia de los "espías" que "invadieron el territorio" de los Estados Unidos.
No hubo ningún miembro del jurado que resistiera la avalancha de prejuicio, presión y el temor de que algo les pasaría si el veredicto era de absolución. Tampoco fue tan difícil convencerles, simplemente porque son de Miami. La histeria no surgió a partir de la detención de los Cinco, es inherente a la cultura, la política, la educación, la economía de la ciudad.
Cambiar la sede era tarea primordial para la defensa. Cuando la defensa apeló a la juez Joan Lenard para cambiar el juicio a otra ciudad, usó como referencia legal un caso histórico en la jurisprudencia—en el entonces Quinto Circuito de la Corte de Apelaciones, llamado, "Pamplin vs Mason". Ese caso decía, en breve, que una comunidad con tanto prejuicio histórico contra un pueblo o grupo demográfico no podía garantizar un jurado imparcial y neutral, no importa que las personas potenciales aseguraran su imparcialidad durante la selección del jurado. "Pamplin" se trataba de un ministro afro-americano en la década de los 60 quien había sido condenado por participar en una protesta por los derechos civiles en un pueblo de Texas, un pueblo fuertemente racista contra la población negra.
El ministro tuvo que apelar a la Corte de Apelaciones, donde los jueces decidieron a favor de él, diciendo que no hubo posibilidad de un jurado imparcial en ese pueblo de Texas. Entonces, el caso de Pamplin vs Mason era muy relevante para el caso de los cinco, en argumentar por un cambio de sede.
Normalmente cuando los abogados de la defensa buscan cambio de sede, es porque el crimen del cual los defendidos están acusados, es tan controversial que el público de esa comunidad está afectada por el sensacionalismo del caso, por el prejuicio que las acusaciones específicas engendran. Entonces, para asegurar un jurado imparcial el lugar del juicio debe ser lo más neutral posible, sin contaminaciones por el caso que se juzga.
Pero en este caso, además del prejuicio generado por la prensa sobre el arresto y las acusaciones a los Cinco, lo que existía contra ellos —más que nada—era y es el prejuicio anti-cubano penetrante en todos los aspectos de la ciudad. Por eso la defensa se refirió a "Pamplin vs Mason", para convencer a la corte de la necesidad de un cambio fuera de Miami. Y mostraron evidencias de que Miami es una comunidad con demasiado prejuicio contra hombres acusados de ser agentes del gobierno cubano.
La fiscalía argumentó lo contrario. "No", dijo, "Miami es una ciudad cosmopólita y grande, se pueden filtrar los prejuicios y puede ser sentado un jurado de personas imparciales".
Para mostrar a los lectores la actitud de la juez, donde negaba constantemente las mociones y acciones de la defensa, estos—después de conseguir el permiso de la juez Lenard para hacer una encuesta de la población de Miami para mostrar el prejuicio anti-cubano—contrataron a Gary Moran, investigador de jurados con mucha experiencia. Él hizo la encuesta que mostró que 76% de las personas en la encuesta indicaron opiniones en contra de Cuba y cualquier persona relacionada con Cuba, que un jurado imparcial de la ciudad no sería posible.
Pero sólo 25 millas lejos en la ciudad de Ft. Lauderdale, esa cifra se bajó a 24% de la población con probable prejuicio contra acusados relacionados con Cuba.
La defensa no pidió cambio a otro distrito lejos, sino a Ft. Lauderdale. No hubiera sido difícil cambiar la sede.
Lenard rechazó la encuesta, no la aceptó como evidencia. Dijo que la cifra de 300 personas en la encuesta no era suficiente, aunque ella aceptó al principio la propuesta de Moran, donde él decía que iba a ser 300 personas.
No hubo casi nada que se decidiera en favor de los Cinco en el juicio.
Repito que la cuestión de prejuicio contra los acusados en el caso de los Cinco se trataba de dos aspectos: primero, la atmósfera hostil en la ciudad contra cualquier persona relacionada con Cuba, y el prejuicio generado por este caso específico, que tenía que ver en parte con la cobertura sensacionalista en la prensa.
Desgraciadamente, la juez rechazó no sólo una vez, sino cinco veces las mociones de la defensa para tratar de cambiar la sede.
¿Y cual fue el fallo del jurado, después de sólo cinco días de deliberación en un juicio que duró siete meses? A pesar del proceso que generó 14.000 páginas de transcripción y evidencias, el jurado regresó, sin haber hecho ninguna pregunta a ninguna de las partes; sin pedir acceso a las evidencias para revisarlas, el jurado declaró a los Cinco culpables de todos los 26 cargos federales.
Regresemos al tema de la prensa miamense.
Cuatro días antes de que el jurado condenara a los Cinco, un artículo escrito por Wilfredo Cancio Isla, del Miami Herald, salió el 4 de junio 2001, titulado: "Cuba usó alucinógenos al adiestrar a sus espías". Es un artículo totalmente falso, y el supuesto testigo de esa práctica, fue citado anónimamente. No se mostraron las supuestas pruebas.
Así, las citas del "testigo" anónimo, sin prueba ninguna, pudieron influenciar a la comunidad miamense, incluyendo a los miembros del jurado. Una de las citas dice: "Puedo asegurar que la Red Avispa [haciendo referencia a los Cinco] es apenas una porción del trabajo de espionaje que se había concebido para infiltrar Estados Unidos a largo plazo".
¿Pero de donde vino esa acusación y mito? Años después de tal acusación, en septiembre del 2006, se descubrió que el autor de ese artículo, Cancio Isla, fue pagado regularmente por el gobierno de Washington para hacer exactamente ese tipo de periodismo falso contra Cuba. Cancio recibió $15.000 por sus artículos, de la agencia, " U.S. Office of Cuban Broadcasting" (Oficina EEUU de Emisiones 'Cubanas'), la misma agencia encargada de las infames emisoras, Radio Martí y TV Martí.
Y si eso no fuese suficiente para ayudar en influenciar al jurado, quedaba todavía la intimidación por los medios de comunicación miamenses.
Un asunto importante sobre el jurado, es que este no estaba aislado durante el proceso. Normalmente, un jurado en un juicio tan controversial hubiera sido aislado, para no ser influido por la discusión "en la calle", por la televisión, radio y periódicos, u otros factores. Sin embargo, los juristas regresaron a sus casas cada día, donde podían encender sus televisiones o leer el periódico, y conversar con sus familias y amigos.
También les fue comunicado no tan sutilmente que algo les podía pasar si no hubiese un veredicto de culpabilidad contra los Cinco al terminar el juicio. Los testimonios durante las sesiones para escoger el jurado, muestran que algunos hablaban del peligro que sentían si el veredicto era de exoneración.
Antes de las deliberaciones del jurado, los camarógrafos de los canales televisivos derechistas siguieron a los juristas agresivamente, y filmaron las placas de sus carros. Esos canales son conocidos por su práctica de publicar las direcciones de la gente que los medios consideran ser "enemigos," las personas que abogan por la normalización de las relaciones con Cuba. En el pasado algunas personas que han tenido su información personal publicada de tal manera han sido atacadas o amenazadas.
EL CARGO DE CONSPIRACIÓN POR FALTA DE EVIDENCIAS
Años antes del arresto de los Cinco, el 12 de septiembre 1998, el FBI ya tenía a algunos de ellos bajo intensa vigilancia, invadiendo sus hogares para buscar "evidencias" y grabando las conversaciones en sus casas.
Pero a pesar de toda esa "investigación" la fiscalía nunca pudo presentar ninguna evidencia de las acusaciones que probaran que eran "espías". La fiscalía admitió en la corte que no existía ni una sola página de evidencia de espionaje. Entonces, usaron la táctica favorita de los fiscales: el cargo de conspiración.
No importaba la falta de evidencia, de todos modos la fiscalía los condenaría con el cargo de "conspiración para cometer espionaje". Eso serviría para condenarlos a largas sentencias.
¿Que significado tiene el cargo de conspiración? Ni tiene que haber un crimen, como en este caso no hubo ningún acto de espionaje: la fiscalía sólo debía afirmar que, en algún momento "en el futuro" los Cinco planeaban cometer espionaje. El espionaje nunca fue el intento de los Cinco.
LA OFERTA DEL FBI DE 'COOPERAR'
El FBI arrestó a 10 cubanos en 1998, incluyendo los Cinco Héroes. Los otro cinco arrestados claudicaron frente al FBI, y testificaron falsamente contra los Cinco Héroes.
Yo creo que el gobierno y todas sus agencias y departamentos envueltos en esta persecución de los Cinco pensaban al comienzo de su campaña contra ellos, que podían forzar a todos los arrestados—los 10 en total—con amenazas y el terror del encarcelamiento de por vida, a traicionar a cualquier de los agentes que se mantuviera firme.
Pero los Cinco se mantuvieron fieles a sus ideales, sus principios, su lealtad a la Revolución Cubana, y nunca aceptaron ninguna oferta de traición ni rendimiento. Cada uno de los Cinco conocía muy bien lo que enfrentaban al rechazar "cooperar" con el gobierno estadounidense. Enfrentarían nada menos que la furia y venganza del imperio por ser fieles a su patria.
Esa es la razón real de porqué los Cinco son héroes, no sólo por su misión anti-terrorista. Es por su conducta honorable e inclaudicable en las entrañas del monstruo—en la sala de la corte de Miami, por su fortaleza durante los 17 meses de aislamiento solitario antes del juicio, y por su resistencia desde entonces, que han contribuido inmensamente a exponer la doble moral de Washington y su afán por los terroristas.
Los Cinco continúan recibiendo apoyo por todo el mundo. Cada día crece la solidaridad en múltiples acciones por una creciente cifra de organizaciones, personalidades y pueblos.
Los cinco arrestados que se rindieron y que dieron testimonio falso, que mintieron para ayudar en condenar a los Cinco Héroes, para evitar una sentencia larga para si mismos, son personas que vivirán siempre con el flagelo de su traición. Los Cinco Héroes, al contrario, serán libres, tarde o temprano serán hombres libres y reivindicados, con la completa satisfacción de haber defendido a su pueblo con honor.
Como dijo René González a su hermano Roberto, "si salgo de la prisión más inteligente que el gobierno, entonces gané. Y vamos a ganar".
LAS APELACIONES
Todo este panorama de peligro e intimidación, del historial de los terroristas, y de la mala conducta de la fiscalía relacionada con la sede, fue confirmada por el panel de tres jueces del Onceno Circuito en Atlanta, en su respuesta el 9 de agosto 2005 a la primera apelación de la defensa. Fue una decisión sin precedente, de 93 páginas, y concluyó con la revocación total de los cargos y el orden de un nuevo juicio. El panel basó su decisión sobre un sólo asunto: la sede, y calificó todo el proceso como una "Tormenta Perfecta" de injusticia contra los Cinco.
Los abogados y muchos juristas, cuando salió esta decisión unánime, consideraron que era tan completa y seriamente deliberada por los jueces, 16 meses—que no fuese posible que el gobierno lograra derrocarla si apelara. Y pensaron que si apelara al pleno de 12 jueces de la corte—el próximo paso en el proceso de apelaciones—entonces esa decisión no pudiera ser anulada por el pleno, tan extensiva que era.
Sin embargo, es lo que pasó. El gobierno en su obsesión por mantener a los Cinco secuestrados, apeló al pleno de la Corte en Atlanta. El 31 de octubre la mayoría del pleno aceptó la apelación del gobierno, y así, efectivamente anuló la decisión de la "Tormenta Perfecta".
La segunda vista oral, la nueva apelación sobre el asunto de la sede, se llevó a cabo el 14 de febrero del 2006, en Atlanta.
Se sabía que los Cinco afrontaban una situación muy difícil: En los 25 años de la existencia de esa corte (ese circuito fue separado del más grande Quinto Circuito y creado como el Onceno) no ha habido ningún acusado que haya ganado su apelación frente a ese pleno. Es muy conservador.
Es muy importante tomar todo esto en cuenta para entender que el caso de los Cinco es un caso político, son presos políticos, y se ganará con el apoyo de la gente de todo el mundo.
Por eso, cada día es imprescindible llevar a cabo acciones de solidaridad con los Cinco. La presión de los pueblos los hará libres.
P. Tomando en cuenta la tremenda concentración y manipulación de los "medios de difusión masiva" norteamericanos ¿Que medios independientes, tanto en la Florida como en el resto de los estados Unidos trabajan por el esclarecimiento de lo que realmente está sucediendo con estas personas?
En Miami existe un periódico independiente, un semanario, llamado Miami New Times, que ha cubierto el caso de los Cinco y la historia del terrorismo en Miami con bastante frecuencia y con una seriedad y periodismo equitativo. Ha expuesto, con riesgo del periódico y de los periodistas del semanario, a los terroristas Bosch, Posada, y otros. Fue el único periódico durante el juicio dentro de Miami que cubrió el caso objetivamente.
También existe la Radio Miami, operado por cubanos progresistas, gente realmente valiente por trabajar abiertamente en Miami con la verdad. Son personas como Max Lesnik, conocido periodista de la comunidad quien sufrió ataques por los terroristas, cuando la oficina de su revista llamada Réplica, fue bombardeada 10 veces en los años 70.
Pero es muy muy difícil la libertad de expresión en Miami.
En el resto de los Estados Unidos, hasta ahora, han sido principalmente los periódicos de la izquierda, de los partidos progresistas y socialistas, quienes han cubierto el caso y la causa por la libertad de los Cinco. Y también una cadena de emisoras vinculadas con la red progresista Pácifica por el país, más otras emisoras. Siempre hay comunicación alternativa. Por supuesto, Internet ha sido una herramienta importante en la difusión de la causa de los Cinco.
Nuestro comité luchó en los primeros años para tratar de conseguir cobertura en la prensa sobre la existencia de estos cinco hombres injustamente encarcelados. Al fin, decidimos hacer una campaña para recaudar $50.000 y publicar en The New York Times, una página completa para romper el bloqueo mediático. Y lo logramos, el 3 de marzo en 2004. Fue realmente un éxito del movimiento, un movimiento relativamente nuevo en ese momento, pero uno con mucha voluntad y solidaridad de todo el mundo.
Poco a poco los grandes medios de comunicación del país e internacionalmente, han dado más cobertura a la causa de los Cinco, especialmente este año. Creo que, por una parte, la entrada de Posada Carriles y el tratamiento a él dado por el gobierno, la hipocresía de dejar a ese infame terrorista libre durante dos meses en Miami, y luego por no enjuiciarlo por su terrorismo, ha ayudado a exponer la injusticia del encarcelamiento de los Cinco.
El otro desarrollo fue la entrevista con Gerardo Hernández por la agencia británica BBC, y luego Reuters de Francia el pasado agosto. Algunos periodistas habían buscado durante años una entrevista con uno de los Cinco, y al fin la prisión dio permiso a Gerardo de ser entrevistado.
La entrevista con Gerardo dio una imagen humanista de los Cinco. El poder de su voz, con la serenidad y certeza de su misión aun estando bajo sentencia de dos cadenas perpetuas, abrió más puertas a la prensa. La entrevista ayudó tremendamente.
En el Comité Nacional por la Libertad de los Cinco Cubanos, hemos empleado mucha creatividad para llegar a muchas audiencias, por medio de foros públicos, la colecta de decenas de miles de firmas en peticiones, con conferencias de prensa cada vez que ha habido un desarrollo en el caso de los Cinco, y ha tenido éxito con la cobertura en la prensa.
Lo más importante es la colaboración entre los grupos e individuos que apoyan a los Cinco. Las redes, los vínculos, la cooperación, comunicación y apoyo mutuo han tenido el mayor efecto. Invitamos a todos los lectores a que se comuniquen con nosotros en la dirección electrónica info@freethefive.org
Por ejemplo, ponemos nuestro sitio web http://www.freethefive.org y nuestros recursos de multi-media, de literatura, de todo, a la disposición de toda la gente. Intercambiemos ideas y sugerencias. En la unión está la fuerza.
P: ¿Que opinión le merece la conclusión a la que llegó un Grupo de Trabajo del sistema de las Naciones Unidas y que fue divulgada por algunos medios de prensa en el sentido de que la detención de los Cinco es arbitraria?
Siempre es importante cuando instituciones y entidades fuera de los Estados Unidos examinen las irregularidades en casos políticos como el de los Cinco. Ayuda a exponer el caso en foros internacionales, y contribuye a la legitimidad del caso también dentro de los Estados Unidos, en los círculos progresistas, con alguna prensa y principalmente en los foros legales donde los juristas sí consideran que el derecho internacional es importante respetar. El hecho de ser un grupo de las Naciones Unidas tiene peso.
Entrevista a Gloria La Riva
(Tercera parte)
Por Orestes Martí y Michel Balivo
Ilustración Juan Kalvellido
En el mensaje que los Cinco antiterroristas cubanos enviaron al pueblo de los Estados Unidos el 17 de junio de 2001, entre otras cosas expusieron:
"Cinco cubanos leales a su pueblo, que durante 33 meses y 5 días hemos soportado el riguroso encierro en las celdas de una prisión de otro país cuyas autoridades son hostiles al nuestro, y donde hemos sido juzgados después de un largo y escandaloso proceso mediante procedimientos, métodos y objetivos de carácter absolutamente políticos y bajo un verdadero diluvio de propaganda malintencionada y fraudulenta, hemos decidido dirigirnos directamente al pueblo norteamericano para hacerle conocer que hemos sido víctimas de una colosal injusticia.
Se nos acusó de poner en peligro la seguridad de Estados Unidos, imputándonos numerosos cargos, e incluso delitos como la conspiración para asesinar los que, por su incuestionable falsedad, no fueron ni podrán ser probados, y por los cuales podemos ser sancionados a decenas de años de prisión y a cadenas perpetuas.
Un jurado constituido en Miami y esto lo explica por sí mismo, nos declaró culpables de todos los cargos que se nos imputaban".......
D Gloria La Riva, en la continuación de nuestra entrevista a distancia, interrumpida frecuentemente por sus múltiples actividades y acciones en pro de la justicia social en su país, responde a nuestras preguntas y brinda sus vivencias y puntos de vista.
P: ¿Cómo puede haber influido el aparente contubernio de las autoridades de la Florida con los grupos de la extrema derecha cubano americana y el juicio con motivaciones políticas llevado acabo contra los Cinco Cubanos actualmente presos en las cárceles norteamericanas?
Para entender la persecución de los Cinco en el juicio, hay que ver todo el panorama desde antes de el arresto hasta el comienzo del juicio (27 meses), y durante el tribunal (7 meses). Todos tomaron parte en la campaña contra los Cinco Héroes: el FBI, la fiscalía, la jueza, oficiales y ex-oficiales, los congresistas cubanos ultraderechistas Ros-Lehtinen y los Díaz-Balart, los terroristas y la prensa.
Fueron tantas las violaciones fuera y dentro de la corte, que realmente es imposible por el espacio que se necesita, difundir todas las irregularidades, pero tocaré algunos puntos.
Fundamentalmente, la injusticia se basa en que el juicio se llevara a cabo en Miami, aunque también hay que dejar claro que los Cinco nunca deberían haber sido arrestados. Su misión era de salvar vidas y eso no es crimen.
EL FBI, HÉCTOR PESQUERA Y LOS TERRORISTAS
Sí el terrorismo es una parte de la política anti-Cuba de Washington (las 3,478 muertes de cubanos, víctimas del terrorismo, son la prueba) entonces no es difícil entender que las autoridades federales—junto con las instituciones y la extrema derecha de Miami—se dedicaran a cazar y perseguir a los hombres que luchaban contra ese terrorismo.
La maquinaria del FBI buscaba a los agentes cubanos que con tanto éxito paraban los ataques terroristas contra Cuba, mientras que dejó —y sigue dejando—a los múltiples grupos terroristas operar con impunidad en el sur de la Florida.
Y los vínculos entre el FBI y los terroristas con oficio legislativo son estrechos: Entre las primeras personas que el mismo director del FBI Louis Freeh llamó después del arresto de los Cinco, fueron los congresistas cubano-americanos, Ileana Ros-Lehtinen y Lincoln Díaz-Balart. ¿Cuál era el propósito de esas llamadas, sino de mantener al tanto a estos políticos de la ultra-derecha, que son además, cómplices con los terroristas?
Ros-Lehtinen tiene un largo historial de apoyo directo a los terroristas. Ella fue quien ayudó en conseguir las avionetas para Hermanos al Rescate. Ella fue quien abogó para que Orlando Bosch se quedara libre en los Estados Unidos en 1989 cuando el Departamento de Justicia preparaba su deportación. (Bush padre, el presidente entonces, y el jefe de la CIA cuando Bosch y Posada orquestaron la voladura del avión cubano, intervino y dio permiso a Bosch para quedarse en EEUU.) El apoyo a Bosch fue uno de los principales temas de su campaña como candidata para el Congreso. ¡Y fue elegida! ¿El jefe de su campaña? Fue Jeb Bush, gobernador actual de la Florida.
Héctor Pesquera, jefe del FBI en Miami, quien dirigió el arresto de los Cinco, tiene una trayectoria muy sospechosa en cuanto al terrorismo de Miami. Realmente se necesitan más investigaciones sobre su estrecha relación con la red de terroristas anti-cubana. Una fuente informativa son los artículos de Jean-Guy Allard del periódico Granma de Cuba.
Pesquera fue asignado para dirigir la oficina del FBI en Miami en septiembre 1998, días antes del arresto de los Cinco el 12 de septiembre, y se retiró del FBI en 2003, para trabajar con el Departamento de "Homeland Security" en la Florida. Era conveniente entonces para Posada Carriles llegar a los Estados Unidos en marzo 2005 por el puerto de Miami, en el barco Santrina, con, entre otros, los terroristas Santiago Álvarez y Osvaldo Mitat.
La relación de Pesquera con los terroristas va más allá de la frontera del país. Según El Nuevo Herald del 10 de noviembre 2005, en la investigación por Venezuela del asesinato por coche bomba del Fiscal General de Venezuela, Danilo Anderson el 18 de noviembre 2004, un colombiano dio testimonio de que Pesquera estaba presente en una reunión en Panamá, donde los terroristas planeaban el asesinato de Anderson y otros líderes venezolanos. Esa reunión tomó lugar entre el 4 y el 6 de septiembre del año 2003. Pesquera todavía era jefe del buró del FBI en Miami.
Es increíble, mirando hacia atrás, y reflexionando sobre esos primeros días del juicio en noviembre del 2000, que mientras los Cinco estaban en la corte con un montón de cargos por su misión anti-terrorista, que en Panamá cuatro terroristas de los más peligrosos que hay, tres de ellos residentes de Miami, Gaspar Jiménez Escobedo, Pedro Remón, y Guillermo Novo Sampol, todos asesinos, estaban planeando con su líder Luis Posada Carriles, el asesinato de Fidel Castro y cientos de personas más, si hubieran tenido éxito.
Y ahora esos terroristas han regresado libres a Miami, mientras los Cinco están encarcelados.
LA FISCALÍA FEDERAL DE MIAMI
La oficina del fiscal federal (U.S. Attorney's office), del distrito de la Florida procesó el caso de los Cinco con un vigor sin precedente, y lo sigue haciendo hasta el presente.
John Kastrenakes, uno de los fiscales que argumentó para el gobierno en el juicio—junto con Caroline Heck Miller, (ella fue quien presentó los argumentos orales para la fiscalía en la última vista oral el 20 de agosto 2007)—sus declaraciones fueron tan ilegales y violadoras del derecho, que aumentaron a casi 35 incidentes de mala conducta por la fiscalía. De esas violaciones, 28 fueron sostenidas por la corte, y forman parte clave de los alegatos de la apelación actual por la defensa. La posición de la defensa de los Cinco es que la mala conducta de la fiscalía contribuyó grandemente a la condena injusta de los Cinco.
Si el panel de tres jueces en Atlanta en esta instancia apelatoria decide que sí hubo mala conducta por parte de la fiscalía, entonces al analizar las dos condenas principales, una por conspiración a cometer asesinato y la otra, conspiración para cometer espionaje, esos cargos tendrían que pasar por un estándar judicial más riguroso, el estándar de "prueba abrumadora o fuerte".
Y como dijo Richard Klugh, abogado de apelación para Fernando González, en la última vista oral el 20 de agosto de este año en Atlanta, el gobierno nunca probó que las evidencias eran abrumadoras ni fuertes, en los dos cargos de conspiración.
Regresando al juicio, a Kastrenakes y a los otros fiscales, no les importaba que violaban las reglas judiciales. Para ellos lo importante era lograr conseguir la condena de los Cinco, y hacerles luchar por años en apelaciones, y esperar que ganara el gobierno por medio de una corte de apelaciones muy conservador, como es el Onceno Circuito de Apelaciones para el sureste del país.
LA PRENSA: HERRAMIENTA DE LA ULTRADERECHA Y LA FISCALÍA
Los medios de comunicación de Miami jugaron un papel clave en condenar a los Cinco fuera y dentro de la corte, por el clima de histeria que incendiaron, y los mitos que emitieron a través de la radio, la tele, y el diario.
Cuando se trata de Cuba, la cobertura en la prensa miamense varía entre amenazante, ultrajante y ridícula. En el caso de los Cinco, la cobertura trataba de imponer una atmósfera de inseguridad en la población por la presencia de los "espías" que "invadieron el territorio" de los Estados Unidos.
No hubo ningún miembro del jurado que resistiera la avalancha de prejuicio, presión y el temor de que algo les pasaría si el veredicto era de absolución. Tampoco fue tan difícil convencerles, simplemente porque son de Miami. La histeria no surgió a partir de la detención de los Cinco, es inherente a la cultura, la política, la educación, la economía de la ciudad.
Cambiar la sede era tarea primordial para la defensa. Cuando la defensa apeló a la juez Joan Lenard para cambiar el juicio a otra ciudad, usó como referencia legal un caso histórico en la jurisprudencia—en el entonces Quinto Circuito de la Corte de Apelaciones, llamado, "Pamplin vs Mason". Ese caso decía, en breve, que una comunidad con tanto prejuicio histórico contra un pueblo o grupo demográfico no podía garantizar un jurado imparcial y neutral, no importa que las personas potenciales aseguraran su imparcialidad durante la selección del jurado. "Pamplin" se trataba de un ministro afro-americano en la década de los 60 quien había sido condenado por participar en una protesta por los derechos civiles en un pueblo de Texas, un pueblo fuertemente racista contra la población negra.
El ministro tuvo que apelar a la Corte de Apelaciones, donde los jueces decidieron a favor de él, diciendo que no hubo posibilidad de un jurado imparcial en ese pueblo de Texas. Entonces, el caso de Pamplin vs Mason era muy relevante para el caso de los cinco, en argumentar por un cambio de sede.
Normalmente cuando los abogados de la defensa buscan cambio de sede, es porque el crimen del cual los defendidos están acusados, es tan controversial que el público de esa comunidad está afectada por el sensacionalismo del caso, por el prejuicio que las acusaciones específicas engendran. Entonces, para asegurar un jurado imparcial el lugar del juicio debe ser lo más neutral posible, sin contaminaciones por el caso que se juzga.
Pero en este caso, además del prejuicio generado por la prensa sobre el arresto y las acusaciones a los Cinco, lo que existía contra ellos —más que nada—era y es el prejuicio anti-cubano penetrante en todos los aspectos de la ciudad. Por eso la defensa se refirió a "Pamplin vs Mason", para convencer a la corte de la necesidad de un cambio fuera de Miami. Y mostraron evidencias de que Miami es una comunidad con demasiado prejuicio contra hombres acusados de ser agentes del gobierno cubano.
La fiscalía argumentó lo contrario. "No", dijo, "Miami es una ciudad cosmopólita y grande, se pueden filtrar los prejuicios y puede ser sentado un jurado de personas imparciales".
Para mostrar a los lectores la actitud de la juez, donde negaba constantemente las mociones y acciones de la defensa, estos—después de conseguir el permiso de la juez Lenard para hacer una encuesta de la población de Miami para mostrar el prejuicio anti-cubano—contrataron a Gary Moran, investigador de jurados con mucha experiencia. Él hizo la encuesta que mostró que 76% de las personas en la encuesta indicaron opiniones en contra de Cuba y cualquier persona relacionada con Cuba, que un jurado imparcial de la ciudad no sería posible.
Pero sólo 25 millas lejos en la ciudad de Ft. Lauderdale, esa cifra se bajó a 24% de la población con probable prejuicio contra acusados relacionados con Cuba.
La defensa no pidió cambio a otro distrito lejos, sino a Ft. Lauderdale. No hubiera sido difícil cambiar la sede.
Lenard rechazó la encuesta, no la aceptó como evidencia. Dijo que la cifra de 300 personas en la encuesta no era suficiente, aunque ella aceptó al principio la propuesta de Moran, donde él decía que iba a ser 300 personas.
No hubo casi nada que se decidiera en favor de los Cinco en el juicio.
Repito que la cuestión de prejuicio contra los acusados en el caso de los Cinco se trataba de dos aspectos: primero, la atmósfera hostil en la ciudad contra cualquier persona relacionada con Cuba, y el prejuicio generado por este caso específico, que tenía que ver en parte con la cobertura sensacionalista en la prensa.
Desgraciadamente, la juez rechazó no sólo una vez, sino cinco veces las mociones de la defensa para tratar de cambiar la sede.
¿Y cual fue el fallo del jurado, después de sólo cinco días de deliberación en un juicio que duró siete meses? A pesar del proceso que generó 14.000 páginas de transcripción y evidencias, el jurado regresó, sin haber hecho ninguna pregunta a ninguna de las partes; sin pedir acceso a las evidencias para revisarlas, el jurado declaró a los Cinco culpables de todos los 26 cargos federales.
Regresemos al tema de la prensa miamense.
Cuatro días antes de que el jurado condenara a los Cinco, un artículo escrito por Wilfredo Cancio Isla, del Miami Herald, salió el 4 de junio 2001, titulado: "Cuba usó alucinógenos al adiestrar a sus espías". Es un artículo totalmente falso, y el supuesto testigo de esa práctica, fue citado anónimamente. No se mostraron las supuestas pruebas.
Así, las citas del "testigo" anónimo, sin prueba ninguna, pudieron influenciar a la comunidad miamense, incluyendo a los miembros del jurado. Una de las citas dice: "Puedo asegurar que la Red Avispa [haciendo referencia a los Cinco] es apenas una porción del trabajo de espionaje que se había concebido para infiltrar Estados Unidos a largo plazo".
¿Pero de donde vino esa acusación y mito? Años después de tal acusación, en septiembre del 2006, se descubrió que el autor de ese artículo, Cancio Isla, fue pagado regularmente por el gobierno de Washington para hacer exactamente ese tipo de periodismo falso contra Cuba. Cancio recibió $15.000 por sus artículos, de la agencia, " U.S. Office of Cuban Broadcasting" (Oficina EEUU de Emisiones 'Cubanas'), la misma agencia encargada de las infames emisoras, Radio Martí y TV Martí.
Y si eso no fuese suficiente para ayudar en influenciar al jurado, quedaba todavía la intimidación por los medios de comunicación miamenses.
Un asunto importante sobre el jurado, es que este no estaba aislado durante el proceso. Normalmente, un jurado en un juicio tan controversial hubiera sido aislado, para no ser influido por la discusión "en la calle", por la televisión, radio y periódicos, u otros factores. Sin embargo, los juristas regresaron a sus casas cada día, donde podían encender sus televisiones o leer el periódico, y conversar con sus familias y amigos.
También les fue comunicado no tan sutilmente que algo les podía pasar si no hubiese un veredicto de culpabilidad contra los Cinco al terminar el juicio. Los testimonios durante las sesiones para escoger el jurado, muestran que algunos hablaban del peligro que sentían si el veredicto era de exoneración.
Antes de las deliberaciones del jurado, los camarógrafos de los canales televisivos derechistas siguieron a los juristas agresivamente, y filmaron las placas de sus carros. Esos canales son conocidos por su práctica de publicar las direcciones de la gente que los medios consideran ser "enemigos," las personas que abogan por la normalización de las relaciones con Cuba. En el pasado algunas personas que han tenido su información personal publicada de tal manera han sido atacadas o amenazadas.
EL CARGO DE CONSPIRACIÓN POR FALTA DE EVIDENCIAS
Años antes del arresto de los Cinco, el 12 de septiembre 1998, el FBI ya tenía a algunos de ellos bajo intensa vigilancia, invadiendo sus hogares para buscar "evidencias" y grabando las conversaciones en sus casas.
Pero a pesar de toda esa "investigación" la fiscalía nunca pudo presentar ninguna evidencia de las acusaciones que probaran que eran "espías". La fiscalía admitió en la corte que no existía ni una sola página de evidencia de espionaje. Entonces, usaron la táctica favorita de los fiscales: el cargo de conspiración.
No importaba la falta de evidencia, de todos modos la fiscalía los condenaría con el cargo de "conspiración para cometer espionaje". Eso serviría para condenarlos a largas sentencias.
¿Que significado tiene el cargo de conspiración? Ni tiene que haber un crimen, como en este caso no hubo ningún acto de espionaje: la fiscalía sólo debía afirmar que, en algún momento "en el futuro" los Cinco planeaban cometer espionaje. El espionaje nunca fue el intento de los Cinco.
LA OFERTA DEL FBI DE 'COOPERAR'
El FBI arrestó a 10 cubanos en 1998, incluyendo los Cinco Héroes. Los otro cinco arrestados claudicaron frente al FBI, y testificaron falsamente contra los Cinco Héroes.
Yo creo que el gobierno y todas sus agencias y departamentos envueltos en esta persecución de los Cinco pensaban al comienzo de su campaña contra ellos, que podían forzar a todos los arrestados—los 10 en total—con amenazas y el terror del encarcelamiento de por vida, a traicionar a cualquier de los agentes que se mantuviera firme.
Pero los Cinco se mantuvieron fieles a sus ideales, sus principios, su lealtad a la Revolución Cubana, y nunca aceptaron ninguna oferta de traición ni rendimiento. Cada uno de los Cinco conocía muy bien lo que enfrentaban al rechazar "cooperar" con el gobierno estadounidense. Enfrentarían nada menos que la furia y venganza del imperio por ser fieles a su patria.
Esa es la razón real de porqué los Cinco son héroes, no sólo por su misión anti-terrorista. Es por su conducta honorable e inclaudicable en las entrañas del monstruo—en la sala de la corte de Miami, por su fortaleza durante los 17 meses de aislamiento solitario antes del juicio, y por su resistencia desde entonces, que han contribuido inmensamente a exponer la doble moral de Washington y su afán por los terroristas.
Los Cinco continúan recibiendo apoyo por todo el mundo. Cada día crece la solidaridad en múltiples acciones por una creciente cifra de organizaciones, personalidades y pueblos.
Los cinco arrestados que se rindieron y que dieron testimonio falso, que mintieron para ayudar en condenar a los Cinco Héroes, para evitar una sentencia larga para si mismos, son personas que vivirán siempre con el flagelo de su traición. Los Cinco Héroes, al contrario, serán libres, tarde o temprano serán hombres libres y reivindicados, con la completa satisfacción de haber defendido a su pueblo con honor.
Como dijo René González a su hermano Roberto, "si salgo de la prisión más inteligente que el gobierno, entonces gané. Y vamos a ganar".
LAS APELACIONES
Todo este panorama de peligro e intimidación, del historial de los terroristas, y de la mala conducta de la fiscalía relacionada con la sede, fue confirmada por el panel de tres jueces del Onceno Circuito en Atlanta, en su respuesta el 9 de agosto 2005 a la primera apelación de la defensa. Fue una decisión sin precedente, de 93 páginas, y concluyó con la revocación total de los cargos y el orden de un nuevo juicio. El panel basó su decisión sobre un sólo asunto: la sede, y calificó todo el proceso como una "Tormenta Perfecta" de injusticia contra los Cinco.
Los abogados y muchos juristas, cuando salió esta decisión unánime, consideraron que era tan completa y seriamente deliberada por los jueces, 16 meses—que no fuese posible que el gobierno lograra derrocarla si apelara. Y pensaron que si apelara al pleno de 12 jueces de la corte—el próximo paso en el proceso de apelaciones—entonces esa decisión no pudiera ser anulada por el pleno, tan extensiva que era.
Sin embargo, es lo que pasó. El gobierno en su obsesión por mantener a los Cinco secuestrados, apeló al pleno de la Corte en Atlanta. El 31 de octubre la mayoría del pleno aceptó la apelación del gobierno, y así, efectivamente anuló la decisión de la "Tormenta Perfecta".
La segunda vista oral, la nueva apelación sobre el asunto de la sede, se llevó a cabo el 14 de febrero del 2006, en Atlanta.
Se sabía que los Cinco afrontaban una situación muy difícil: En los 25 años de la existencia de esa corte (ese circuito fue separado del más grande Quinto Circuito y creado como el Onceno) no ha habido ningún acusado que haya ganado su apelación frente a ese pleno. Es muy conservador.
Es muy importante tomar todo esto en cuenta para entender que el caso de los Cinco es un caso político, son presos políticos, y se ganará con el apoyo de la gente de todo el mundo.
Por eso, cada día es imprescindible llevar a cabo acciones de solidaridad con los Cinco. La presión de los pueblos los hará libres.
P. Tomando en cuenta la tremenda concentración y manipulación de los "medios de difusión masiva" norteamericanos ¿Que medios independientes, tanto en la Florida como en el resto de los estados Unidos trabajan por el esclarecimiento de lo que realmente está sucediendo con estas personas?
En Miami existe un periódico independiente, un semanario, llamado Miami New Times, que ha cubierto el caso de los Cinco y la historia del terrorismo en Miami con bastante frecuencia y con una seriedad y periodismo equitativo. Ha expuesto, con riesgo del periódico y de los periodistas del semanario, a los terroristas Bosch, Posada, y otros. Fue el único periódico durante el juicio dentro de Miami que cubrió el caso objetivamente.
También existe la Radio Miami, operado por cubanos progresistas, gente realmente valiente por trabajar abiertamente en Miami con la verdad. Son personas como Max Lesnik, conocido periodista de la comunidad quien sufrió ataques por los terroristas, cuando la oficina de su revista llamada Réplica, fue bombardeada 10 veces en los años 70.
Pero es muy muy difícil la libertad de expresión en Miami.
En el resto de los Estados Unidos, hasta ahora, han sido principalmente los periódicos de la izquierda, de los partidos progresistas y socialistas, quienes han cubierto el caso y la causa por la libertad de los Cinco. Y también una cadena de emisoras vinculadas con la red progresista Pácifica por el país, más otras emisoras. Siempre hay comunicación alternativa. Por supuesto, Internet ha sido una herramienta importante en la difusión de la causa de los Cinco.
Nuestro comité luchó en los primeros años para tratar de conseguir cobertura en la prensa sobre la existencia de estos cinco hombres injustamente encarcelados. Al fin, decidimos hacer una campaña para recaudar $50.000 y publicar en The New York Times, una página completa para romper el bloqueo mediático. Y lo logramos, el 3 de marzo en 2004. Fue realmente un éxito del movimiento, un movimiento relativamente nuevo en ese momento, pero uno con mucha voluntad y solidaridad de todo el mundo.
Poco a poco los grandes medios de comunicación del país e internacionalmente, han dado más cobertura a la causa de los Cinco, especialmente este año. Creo que, por una parte, la entrada de Posada Carriles y el tratamiento a él dado por el gobierno, la hipocresía de dejar a ese infame terrorista libre durante dos meses en Miami, y luego por no enjuiciarlo por su terrorismo, ha ayudado a exponer la injusticia del encarcelamiento de los Cinco.
El otro desarrollo fue la entrevista con Gerardo Hernández por la agencia británica BBC, y luego Reuters de Francia el pasado agosto. Algunos periodistas habían buscado durante años una entrevista con uno de los Cinco, y al fin la prisión dio permiso a Gerardo de ser entrevistado.
La entrevista con Gerardo dio una imagen humanista de los Cinco. El poder de su voz, con la serenidad y certeza de su misión aun estando bajo sentencia de dos cadenas perpetuas, abrió más puertas a la prensa. La entrevista ayudó tremendamente.
En el Comité Nacional por la Libertad de los Cinco Cubanos, hemos empleado mucha creatividad para llegar a muchas audiencias, por medio de foros públicos, la colecta de decenas de miles de firmas en peticiones, con conferencias de prensa cada vez que ha habido un desarrollo en el caso de los Cinco, y ha tenido éxito con la cobertura en la prensa.
Lo más importante es la colaboración entre los grupos e individuos que apoyan a los Cinco. Las redes, los vínculos, la cooperación, comunicación y apoyo mutuo han tenido el mayor efecto. Invitamos a todos los lectores a que se comuniquen con nosotros en la dirección electrónica info@freethefive.org
Por ejemplo, ponemos nuestro sitio web http://www.freethefive.org y nuestros recursos de multi-media, de literatura, de todo, a la disposición de toda la gente. Intercambiemos ideas y sugerencias. En la unión está la fuerza.
P: ¿Que opinión le merece la conclusión a la que llegó un Grupo de Trabajo del sistema de las Naciones Unidas y que fue divulgada por algunos medios de prensa en el sentido de que la detención de los Cinco es arbitraria?
Siempre es importante cuando instituciones y entidades fuera de los Estados Unidos examinen las irregularidades en casos políticos como el de los Cinco. Ayuda a exponer el caso en foros internacionales, y contribuye a la legitimidad del caso también dentro de los Estados Unidos, en los círculos progresistas, con alguna prensa y principalmente en los foros legales donde los juristas sí consideran que el derecho internacional es importante respetar. El hecho de ser un grupo de las Naciones Unidas tiene peso.
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