“CHAVISMO”
UNA FRANQUICIA DEL PASADO
Por: Jorge Mier Hoffman
Hoy 18 de diciembre del 2006, los Bolivarianos estamos de júbilo, fe y esperanza en la nueva etapa de la Revolución que se inicia a partir del próximo año, con dos anuncios trascendentales del presidente Chávez: la desaparición del MVR como el partido que poseía la Franquicia del “chavismo” y el nacimiento del “PARTIDO SOCIALISTA UNIDO DE VENEZUELA”, PASUV, fundamentado en la doctrina de Simón Bolívar, como lo señala expresamente la Constitución Bolivariana de Venezuela:
“Artículo 1. La República Bolivariana de Venezuela es irrevocablemente libre e independiente y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad, justicia y paz internacional en la doctrina de Simón Bolívar, el Libertador”
Atrás quedó la Franquicia del “chavismo” que desde 1997 comercializaba el MOVIMIENTO V REPÚBLICA, MVR, aprovechando, como las demás organizaciones del “Bloque del Cambio”, la carrera electoral vertiginosa de Hugo Chávez Frías con 9 triunfos consecutivos en 8 años de gobierno:
El 6 de diciembre de 1998 Chávez gana con el 56 % de la preferencia electoral.
El 25 de abril de 1999 Chávez ganan el referendo consultivo para crear la Asamblea Nacional Constituyente.
El 25 de julio de 1999 Chávez, gana 120 cargos de los 131 cargos a la Asamblea Nacional Constituyente.
El 15 de diciembre de 1999 Chávez gana el llamado para la aprobación de la Constitución Bolivariana de Venezuela.
El 30 de julio del 2000 Chávez gana la relegitimación con casi un 60 % de los votos y logra 13 gobernaciones de las 23.
El 15 de agosto del 2004 Chávez gana el referendo confirmatorio con el 59 % de la preferencia electoral.
El 31 de octubre del 2004 Chávez gana 21 de las 23 gobernaciones y más del 75 % de las alcaldías.
El 4 de diciembre del 2005 Chávez gana el 100 % de los puestos a la Asamblea Nacional.
El 3 de diciembre del 2006 Chávez gana su novena victoria aplastante con más de un 60 % de los votos para su reelección presidencial.
Dicho de otra manera, Chávez es el líder de la Revolución Bolivariana y el pueblo vota por Chávez
Por 8 años el “chavismo” se convirtió en una franquicia que usaban indistintamente patriotas, socialistas, capitalistas y oportunistas como marca comercial de gran demanda popular… Franquicia “chavista” que utilizaron funestos personajes para organizar “tribus” que negociaban la justicia… Franquicia “chavista” que utilizan partidos políticos para apropiarse de los votos de Chávez… Franquicia “chavista” que aprovechan las organizaciones de izquierda para infiltrar su ideología política… Franquicia “chavista” que le otorga Patente de Corso a los corruptos de la “Cuarta República” para continuar sus fechorías… Franquicia “chavista” que utilizan concejales, diputados y funestos funcionarios públicos para justificar la ineficiencia, la impunidad y la corrupción… En fin… una Franquicia “chavista” que secuestró la voluntad popular para burlarse del presidente, del pueblo y la doctrina bolivariana.
Con la eliminación de la Franquicia “chavista” anunciada por Chávez, ya no hay intermediarios, arribistas ni oportunistas… Es el momento de depurar la Revolución con la fórmula electoral que propuso el Padre de la Patria
Bolívar estaba conciente que la democracia bolivariana requería de aditivos propios a la idiosincrasia del pueblo, ya que la proliferación de partidos políticos convirtieron la gobernabilidad en un negocio, y muchos políticos fueron testaferros de sectores económicos nacionales y extranjero… Célebre son las opiniones que al respecto tenía el Libertador:
“Malos legisladores nos conducen a la anarquía, después a la tiranía y siempre a la ruina. Jamás un Congreso ha salvado una República, por la dificultad que hay para componer un buen Congreso. Los hombres de mérito no van a él porque los caminos son horribles y las distancias inmensas. Solamente los majaderos e intrigantes se encargan de la representación popular. Para formar un legislador, se necesita de educarlo en una escuela de moral, de justicia y de leyes”
Lo dicho por Bolívar ha sido la constante en nuestra historia pseudo-democrática, con personajes que se hacían llamar “representantes del pueblo”, y luego que ganaban las elecciones, usaron el cargo para pagar favores políticos… Gobernantes que convirtieron el cargo público en un puente para hacer negocios, y sólo se acordaban del pueblo en las elecciones cuando tenían que cautivar a los incautos votantes.
Por ello Bolívar nos dejó la fórmula para lograr un cuerpo de representación popular fieles a la Constitución y a la doctrina bolivariana, con gobernantes consagrados a las leyes y comprometidos con sus electores
El modelo de democracia diseñada por Bolívar, lograba el equilibrio ideal para que los partidos políticos desaparecieran del panorama político luego de finalizada cada elección, evitando así que se convirtieran, como son hoy por hoy, en la sombra permanente de distorsión, chantaje, trabas, y enriquecimiento de la función pública; y por consiguiente, detonadores de los Golpes de Estado que rompen con el hilo constitucional… Por ello decía Bolívar:
“Por lo mismo que ninguna forma de gobierno es tan sensible como la democracia, su estructura debe ser de la mayor solidez y sus instituciones consultarse constantemente para que haya estabilidad. Si no es así, contemos que se establece un ensayo de gobierno, y no un sistema permanente, contemos con una sociedad díscola, tumultuosa y anárquica, y no con un establecimiento social donde tenga su imperio la felicidad, la paz y la justicia”
Al evaluar el modelo electoral del Libertador, se deduce una elección piramidal, sobre las bases de liderazgo y apoyo popular, como condición para ascender en la pirámide de la gobernabilidad, que llevaría finalmente a la elección del presidente de la República con indiscutible apoyo popular.
En este Modelo Electoral Bolivariano no hay cúpulas partidistas, ni amiguismo, ni oportunistas, ni arribistas ni infiltrados, ni mucho menos hay dedocracia..!
Con este esquema de elecciones consecutivas desde las bases populares, no se requería un ambiente festivo electoral, como las campañas carnestolendas a que nos tienen acostumbrados los partidos políticos tradicionales: Son Campañas que exigen miles de millones en publicidad para vender “imagen” y no liderazgo... En este esquema electoral ANTIBOLIVARIANIO, los maquilladores de imagen y los medios de televisivos, radio y prensa, como vendedores de productos, venden también concejales, alcaldes, diputados, gobernadores, y hasta un Presidente de la República, sin importar si son buenos o malos... Gana el que tenga más dinero..! Esto obliga al candidato a pactar con sectores dispuestos a financiar su campaña a cambio de favores, razón por la cual la corrupción se ha convertido en un factor predominante en la democracia venezolana… y lo más grave: la fórmula ideal del imperialismo para imponer sus candidatos apátridas.
El proceso electoral propuesto por Bolívar, según se desprende de sus innumerables escritos, se iniciaba en los sectores populares y más representativos de la sociedad, con la designación de los representantes de la Sociedad Patriótica, o Círculos Bolivarianos constituidos en Organizaciones Comunales, quienes elegirían a los más eficientes y que gozaban del aprecio de la colectividad... Allí no valían demagogos, infiltrados ni corruptos... Sólo los más preparados, comprometidos y con auténtica vocación de servicios, se ganaban el aprecio del colectivo para optar al cargo: REPRESENTANTE DEL PUEBLO..!
Así se lograban auténticos líderes comunitarios, como la base política de una auténtica Revolución Bolivariana
Luego… se sucedían elecciones de segundo, tercero y cuarto grado, cuando los elegidos en primer grado debían seleccionar a los concejales de cada cabildo, y entre ellos elegir al Alcalde... Entre los alcaldes saldría el Gobernador Provincial y luego los diputados, hasta llegar a la cúspide de la pirámide con la elección del Presidente, como el consenso de una depuración consecutiva de la voluntad popular en todos los estratos de la sociedad; por eso decía Bolívar: “Las continuas elecciones son indispensables en una democracia como la de Venezuela”
¿..Pero quienes votaban..? decía Bolívar: “Entre la comunidad se elige uno de cada diez vecinos, el cual debe realizar un oficio digno, ser respetado por la sociedad, y como condición: saber leer y escribir”... Es más que evidente, que este modelo electoral es una garantía de que los elegidos siempre contarían con el apoyo entusiasta de las bases populares, ya que los concejales, alcaldes, diputados y hasta el presidente, surgen como resultado de lo más representativo de toda la sociedad, y por consiguiente, serían los más idóneos para ocupar dichos cargos, no tanto por su intelectualidad, sino por su VOCACIÓN DE SERVICIO..! y es la respuesta a la desesperación de Bolívar cuando se refería a los cargos de elección popular: “Los hombres de mérito no van a él porque los caminos son horribles y las distancias inmensas. Solamente los majaderos e intrigantes se encargan de la representación popular”
Si hoy tomáramos el “Esquema Electoral” propuesto por Bolívar, de inmediato reinaría la esperanza que reclama el país; pero sobre todo: se eliminaría a los candidatos impuestos por las cúpulas partidistas... le quitaría a los partidos políticos el papel protagónico y permanente que enturbia la gestión del gobernante... no les permitiría a los negociadores políticos chantajear a los candidatos con fuentes de financiamiento... todos los candidatos tendrían las mismas oportunidades para optar al cargo de elección popular… no habría ventajismo en un proceso electoral transparente, y sin la trampa de la manipulación de las campañas electorales... el proceso de votación se podría instrumentar rápidamente, sin “captahuellas”, Padrón Electoral ni Cuadernos Electorales… no existiría el peligro de la manipulación de votos que siempre está presente en las Mesas de votación… se acabarían las campañas mil millonarias, la manipulación de imagen y la guerra sucia... y lo más importante, es que los elegidos responderían al sentimiento nacional electoral, ya que no serían impuestos por compromisos políticos ni económicos, sino que surgirían de la voluntad popular, con su liderazgo innato, legítimo y participativo; y no como mucha veces sucede, donde el país se divide según los candidatos, y desde el primer momento, los perdedores rechazan al ganador, asumiendo una actitud anárquica y obstaculizadora en contra de los mandatarios municipales, estadales y nacionales..!
Como dijo Alberto Sanabria: “Cualquier Carta de Bolívar es modelo de enseñanza y compendio de nobles ideas y de brillante iniciativa, que deberían tener como ejemplo los actuales gobernantes de América”
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Comentarios de la entrada
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Hola, Zenia desde
ResponderBorrarhttp://imaginados.blogia.com
Sin Unidad no hay nada.
Me recuerda este proceso uno muy parecido que se efectuó aquí a principios de la Revolución para unir las ORI y el PURS