Por: Ricardo Abud
La gravedad de la situación económica de Venezuela es preocupante, más allá de las consideraciones de los propagandistas de oficio que, sin entender, pretenden mostrar una realidad virtual y hacernos creer que todo está bien y vamos superando la crisis, falso.
No es un secreto, pero sí algo que nadie desde las esferas del alto gobierno nos dice, menos aún hablan del impacto que ha tenido, la DEROGACIÓN DE LA LEY DE ILÍCITOS CAMBIARIOS, NI LA DE ALGUNOS ARTÍCULOS DE LA LEY DE PRECIOS JUSTOS (responsable= ANC), el impacto real de esas medidas que coadyuvaron al desastre económico que hoy vivimos, permitió la dolarización del país y la hiperinflación que hemos transitado, tan pendejos nos creen que hoy nos quieren vender la idea de que el país no está dolarizado, que todo es un invento de los detractores del gobierno, según ellos el bolívar digital (aún no he visto un solo billete de esos digitales) debe ser la moneda de circulación nacional y aquello que hacen llamar petro. ¿Porque ese cambio de discurso?
Actualmente la AN, discute una ley donde penaliza la utilización del dólar con el 20% en las grandes transacciones, algo similar que en Cuba (curioso) y nos vuelven a creer tan pendejos, diciendo que eso no impactará al pueblo, sino que se verán afectados los que utilicen la moneda norteamericana, regresar al bolívar es el engaño. ¿Porque debemos regresar al bolívar si el país no está dolarizado?
El salario mínimo sigue siendo 1.7$ mensuales el más bajo del mundo, en uno de los países con la mayor reserva petrolera, sin contar con la cantidad de minerales preciosos y extraños con los que se ha bendecido a esta patria.
El salario mínimo, es la remuneración mínima que debe recibir un asalariado por parte de su empleador por el trabajo efectuado en un tiempo determinado, lo que paradójicamente también percibe un pensionado e incluso un jubilado. EL SALARIO DEVENGADO MENSUALMENTE DEBE DE SATISFACER NUESTRAS NECESIDADES TANTO MATERIALES COMO ESPIRITUALES Y ESO ES UN CLARO EJEMPLO DE LO QUE DEBE SER EL SALARIO, EL MISMO NO SOLO DEBE SATISFACER LAS NECESIDADES MATERIALES, EL SALARIO DE POR SÍ, SATISFACE NUESTRAS NECESIDADES ESPIRITUALES, LO MATERIAL Y ESPIRITUAL ES UNA UNIDAD DIALÉCTICA, MARXISTA, LA POLÍTICA SALARIAL COADYUVA NECESARIAMENTE A LA REALIZACIÓN INDIVIDUAL Y COLECTIVA EN LA SOCIEDAD, CRECE SU AUTOESTIMA Y MEJORA SU CONDICIÓN SOCIAL. Por otro lado, el deterioro del salario ante los ingresos de las diferentes formas de propiedad, como fuentes de ingreso, generan crisis y la agudización de las contradicciones en la sociedad, otro de los elementos fundamentales del problema económico en nuestro país.
En la realidad social que vivimos, existe un profundo desestímulo al trabajo y a la formación o mejoramiento académico, con el correspondiente deterioro de la productividad, la disminución de la producción y el debilitamiento del papel rector del Estado en la actividad económica del país, es en ese momento donde pensamos en migrar a otras latitudes, donde podamos generar el dinero mínimo suficiente para satisfacer nuestras necesidades, materiales y espirituales. La avalancha de compatriotas no se detiene, muchos se siguen sumando a las estadísticas, no hay manera de frenar el desmoronamiento social que estamos presenciando.
Millones de venezolanos han salido del país, en busca de nuevos horizontes, sustituir lo viejo por lo nuevo, empezar de cero, fuera del país que los educó profesionalmente o les enseño un modo de vida útil, dejan atrás TODO para dar paso al nuevo comienzo, se rompe la estructura de la sociedad, como lo es la familia y se deteriora el país de manera vertiginosa. Esta condición sin lugar a dudas tiene repercusiones sociales que muchos han querido silenciar, obviar o no dar mayor importancia, las consecuencias son devastadoras. La cantidad de profesionales que han emigrado del país es inmensa, formados en universidades nacionales gratuitas e internacionales (en su mayoría becados) lo cual se puede traducir en una inversión mil millonarias PÉRDIDA del Estado destinada a formar cuadros profesionales que hoy laboran en otros países, que no invirtieron capital financiero (personal) en su formación.
La mayoría de los “mejores” han abandonado el país. Aparte del daño estrictamente económico se manifiesta con intensidad en lo académico en donde la pérdida de la capacidad docente anula la posibilidad de formar nuevos talentos interrumpiendo el circuito virtuoso de la generación de relevo. En una “era” que ha sido descrita como la “del conocimiento”, la pérdida de talento pone en peligro las posibilidades de desarrollo local en áreas críticas, como son la electrónica, las telecomunicaciones, la informática y la biotecnología. Lo que supone preguntar: ¿Quiénes formarán a los cuadros emergentes? ¿Qué calidad de educación recibirán?, ¿peor aún, quienes seguirán estudios superiores hoy en Venezuela? cuando vemos una capa media de la sociedad más pobre y con las esperanzas muy reducidas, una Venezuela donde ser plomero o mecánico –por ejemplo- hoy es más lucrativo que ser ingeniero, abogado.
Hoy prevalece la economía de los bodegones, algo insólito en un país que vive una de las peores crisis a nivel mundial reflejada en los millones de compatriotas que decidieron irse del país, pasando vicisitudes, discriminación y esclavizados, pero aún bajo esas condiciones siguen saliendo venezolanos a otros países en busca de mejorar su situación económica, para el estado venezolano no existen estos compatriotas (no vengan con el cuento de la Misión regreso a casa) están mejor fuera del país algo muy similar a la Cuba de la que muchos hacen referencia.
La sociedad esta fracturada con el desmoronamiento de su núcleo, la Antropología Estructural señalaba que “la familia, apoyada en la unión más o menos duradera y socialmente aprobada de un hombre, una mujer y sus hijos, es un fenómeno universal, presente en todos los tipos de sociedades” pero su composición es mayor y cuando se fractura, comienza un punto de inflexión que no tienen regreso, su desmoronamiento se concibe como una imagen invertida socialmente despreciable, pareciera un plan premeditado, atacar la unión familiar como método, para de esta forma sea más fácil mantenerse en el poder, divide y vencerás.
La no flexibilización laboral impuesta por la pandemia ha vulnerado la capacidad de cohesión de la familia obrera. Como unidad de consumo se muestra endeble, y como unidad socio-afectiva aparece impotente para frenar el avasallamiento de sus condiciones de vida, mantenerlos aislados sin ningún tipo de conexión, los ha neutralizado.
El gobierno actual ha intensificado los conflictos en la unidad domestica de la estructura socialmente aceptable, le resulta más imperioso controlar y centralizar los flujos sociales que van y vienen, y agudizar sus contradicciones, sencillamente es una imposición de la realidad, a la cual controla cada vez más, intensificando su enclaustro en el poder.
Las consecuencias han sido devastadoras, hiperinflación, dolarización de la económica, salario mínimo 1.7$, por consiguiente, migración a otros países y la destrucción del núcleo familiar, todo en su conjunto ha modificado el carácter social de la Revolución Bolivariana, atenta contra los principios de solidaridad, es un impuesto tácito que pagan las inmensas mayorías de escasos recursos a las minorías, deshumaniza la esencia del trabajo el cual no está alineado al bien común. ha contribuido a desmontar el sueño implícito del Plan de la Patria, legado único del Comandante Hugo Chávez y con un rompimiento flagrante de la Constitución de La República Bolivariana de Venezuela, la cual establece de manera taxativa: “Artículo 320. El Estado debe promover y defender la estabilidad económica, evitar la vulnerabilidad de la economía y velar por la estabilidad monetaria y de precios, para asegurar el bienestar social (…)”.
“Artículo 75 El Estado protegerá a las familias como asociación natural de la sociedad y como el espacio fundamental para el desarrollo integral de las personas. Las relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes, la solidaridad, el esfuerzo común, la comprensión mutua y el respeto recíproco entre sus integrantes. El Estado garantizará protección a la madre, al padre o a quienes ejerzan la jefatura de la familia. Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a vivir, ser criados o criadas y a desarrollarse en el seno de su familia de origen (…)”.
Venezuela sigue siendo un país propenso a la implosión social, la desigualdad está muy bien marcada por la mala praxis de la economía, lo que ha generado la aporofobia en el país, desmontando los esfuerzos de inclusión social. El no asertividad ante la raíz y esencia de lo que sucede en nuestro país contribuye a la insatisfacción social de los ciudadanos.
NO HAY NADA MÁS EXCLUYENTE QUE SER POBRE
P.D: Es necesario recordar (caminamos siempre a olvidar, sin memoria histórica) cuando GORBACHOV confesó durante un discurso en la Universidad norteamericana de Turquía que: “El objetivo de mi vida fue la aniquilación del comunismo […] mi esposa me apoyó plenamente y lo entendió incluso antes que yo […] para lograrlo logré encontrar compañeros de lucha, entre ellos A.N. Yakovlev y Shevardnadze”. (http://razonesdecuba.cubadebate.cu/articulos/gorbachov-se-confiesa-el-objetivo-de-mi-vida-fue-la-aniquilacion-del-comunismo/)
Nota: Cualquier parecido con nuestra realidad es pura coincidencia
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