El Ministerio de Asuntos Exteriores dijo en un comunicado que Beijing tomará las medidas en defensa de sus intereses ante dicha legislación y el decreto firmado por el presidente Donald Trump para oficializar el cese del trato preferencial al territorio sureño.
Reafirmó enérgica condena a ambas acciones de Washington y ratificó la determinación a proteger la soberanía, seguridad e intereses de desarrollo, lo cual no admite injerencia extranjera.
La Cancillería advirtió a la Casa Blanca de que fracasará en su intento por obstaculizar la reciente ley para reforzar la seguridad nacional en Hong Kong, fortalecer su sistema legal, afianzar la prosperidad y estabilidad socioeconómica.
Finalmente, instó al país norteño a corregir sus errores y abstenerse de poner en vigor su norma pues -advirtió- tendrá el efecto contraproducente para sus propios intereses en la zona.
Trump firmó hace unas horas la denominada Ley de la Autonomía de Hong Kong y además el decreto que elimina el trato especial 'como un territorio de viajes y aduanas separado' de China continental.
La primera medida contempla restricciones de visas a sus funcionarios, congelación de activos y sanciones económicas contra importantes instituciones gubernamentales del gigante asiático.
Mientras, la segunda implica cambiar los acuerdos bilaterales para suprimir visados, mantener una moneda indexada al dólar y políticas favorables a los negocios, aranceles y protecciones mercantiles.
Para la llamada Perla del Oriente significaría recibir el mismo trato que el resto de China continental en esas áreas de comercio, inversión e inmigración y, en consecuencia, perder muchas ventajas que le permitieron convertirse en un centro financiero de clase mundial como Londres y Nueva York.
El presidente norteamericano amenazó con ambas jugadas luego de aprobarse la ley de seguridad nacional para Hong Kong, con la cual Beijing se plantea neutralizar la organización y ejecución de actos de terrorismo, secesión, subversión del poder del Estado y de intromisión foránea.
Según las autoridades, dicha norma buscar afianzar la efectiva implementación de la política Un país, dos sistemas.
La insistencia de Estados Unidos de entrometerse en ese y otros temas sensibles como el Tíbet, Xinjiang, Taiwán y el mar Meriodinal de China, coloca a las relaciones bilaterales en su peor etapa e incluso recientemente el canciller Wang Yi alertó de que empuja a ambas potencias hacia la Guerra Fría.
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