Su intención es estar por tiempo indefinido en esa actitud hasta ser promulgadas aquellas normas que tuvieron el visto bueno del poder Legislativo.
La Cámara de Diputados dio el miércoles la segunda media sanción, tras la primera del Senado la semana pasada, a las propuestas de los labriegos en busca de enfrentar lo que califican de severa crisis por la cual atraviesan.
Esos son la norma que declara en emergencia nacional la agricultura familiar, como laboran esos pequeños productores del campo, y la dirigida al subsidio de deudas vencidas para una buena parte de ellos.
La primera tiene la finalidad de atender los problemas de asistencia técnica y crediticia, de acceso a servicios básicos, de vivienda y de tierra para los campesinos dedicados a esa actividad en todo el país.
Comprende la emergencia por un plazo de 180 días, durante los cuales los ministerios e instituciones gubernamentales deberán tomar todas las medidas conducentes a cooperar con esos labriegos.
Respecto a la norma sobre el subsidio, lo llama rehabilitación financiera para los propietarios de fincas que no excedan las 30 hectáreas y cuyos préstamos fueron realmente invertidos en la producción agrícola.
Esa propuesta encontró el rechazo gubernamental, y de otros sectores, al considerarla inviable dado el alto monto de dichos débitos, calculados en el equivalente a más de 50 millones de dólares, y no tener recursos para financiarlos.
La dirigencia de la Coordinadora Nacional Intersectorial, convocante de la movilización, anunció cuando celebraba la aprobación que la acampada y las marchas por el Microcentro capitalino se mantendrán.
Lo harán por tiempo indefinido si es necesario hasta tanto el jefe del Ejecutivo, Horacio Cartes, firme los decretos para la promulgación de cada ley.
Incluso, los labriegos anunciaron para este viernes una caminata en dirección a la Residencia Presidencial de Mburuvicha Róga (Casa del Líder, en guaraní) para expresar ese reclamo con carácter urgente.
Ya la habían iniciado ayer, pero a última hora se decidió postergarla y volver al área de asiento, frente a la sede del Congreso Nacional, en busca de un descanso para renovar fuerzas hacia nuevas acciones.
A medida que pasa el tiempo más sectores del empresariado se van sumando al rechazo a la medida de subsidio a las deudas de los labriegos, considerado un acto de justicia para con ellos por el presidente del Senado y del Congreso, Fernando Lugo.
Lugo afirmó que la aplicación de estos proyectos que asisten a los pequeños productores campesinos dependerá de la voluntad política y la sensibilidad social del gobierno.
agp/jf
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