Dos portaviones y un submarino nuclear han sido desplegados por EEUU en la península de Corea, listos para llevar a cabo ataques con misiles contra Corea del Norte "de sufrir cualquier provocación", informa el diario japonés Nikkei.
El periódico estima que unos 300 misiles de crucero pueden alcanzar blancos militares clave en el país, incluyendo instalaciones subterráneas. Estados Unidos espera que el aumento de la presión militar sobre Pyongyang lo obligue a hacer concesiones respecto a su programa de armas.
La tensión en torno a la península de Corea se debe en parte a la presencia de un grupo de ataque naval estadounidense, dirigido por el portaviones nuclear USS Carl Vinson. El grupo consta de 24 cazabombarderos F/A-18, 10 aviones cisterna, 10 aviones antisubmarinos S-3A, seis helicópteros antisubmarinos SH-3H, cuatro aviones de guerra electrónica EA-6B y cuatro aviones de alerta temprana E-2.
Según varios informes citados por Nikkei, recientemente en Corea del Norte ha habido grandes movimientos de personal y suministros de equipo a instalaciones subterráneas y se han detectado comunicaciones por radio que se consideran reservadas para emergencias. Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos siguieron de cerca estos movimientos para identificar posibles objetivos primarios en caso de hostilidades.
Los primeros objetivos de los misiles de crucero estadounidenses serían los sitios de pruebas nucleares, las instalaciones de enriquecimiento de uranio y los túneles que ocultan lanzadores de misiles móviles. El país norteamericano es capaz de lanzar 300 misiles, lo que es cinco veces la cantidad utilizada en el ataque a Siria que tuvo lugar en Abril.
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