Ramallah, 30 jun (PL) El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, se marcha hoy de Levante con las manos vacías tras intensas, y futiles, conversaciones con el presidente palestino, Mahmoud Abbas, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
La reunión (de Kerry) con el presidente Abbas fue positiva y profunda, pero no ha habido avances y aún existe una brecha entre las posturas palestinas e israelíes, subrayó en rueda de prensa el negociador principal palestino, Saeb Erekat, tras el último encuentro entre ambos hombres.
El jefe de la diplomacia estadounidense, que viajará hoy al Sultanato de Brunei para asistir a una reunión de ministros asiáticos, se entrevistó por separado tres veces con Netanyahu y con Abbas y una con el presidente israelí, Shimon Peres, el sábado, y pospuso una cena que tenía programada anoche con el presidente de las Emiratos Arabes Unidos, Khalifa bin Zayed Al Nahayan.
La delegación de Kerry se ha abstenido de proveer una evaluación de las gestiones y si el funcionario tiene programado retornar a la zona a reiniciar su política de lanzadera en un futuro previsible.
El disenso entre palestinos e israelíes presagiaba un fracaso de los intentos: los primeros demandan el cese de la construcción de asentamientos paramilitares sionistas en Cisjordania y el este de Jerusalén y la excarcelación de los presos políticos en cárceles de las fuerzas ocupantes; Tel Aviv rehusa aceptar lo que denomina precondiciones.
Pocas horas antes del inicio de la visita de Kerry, el comité de planificación israelí autorizó la construcción de casi un centenar de viviendas en la Cisjordania, decisión que la académica palestina Hanan Ashrawi calificó de mensaje claro sobre la falta de voluntad del gobierno Netanyahu de emprender conversaciones serias.
mgt/msl
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